La crisis climática es una crisis de salud pública. Tiene un enorme impacto en nuestra salud, a través de  dos vías: una directa sobre la mortalidad y la morbilidad debido a fenómenos meteorológicos extremos como olas de calor, inundaciones, etc.; Y otra indirecta, mediante los impactos sobre los ecosistemas, por ejemplo, modificando los hábitats de los vectores, y sobre los sistemas sociales influyendo en la seguridad alimentaria, afectando a la capacidad laboral y la salud mental y provocando migraciones climáticas. Las personas y las comunidades más vulnerables por sus condiciones de vida y sociales son las más afectadas por el cambio climático, que además, contribuye a aumentar las desigualdades y las inequidades en salud.

Las soluciones al cambio climático pueden reportar beneficios, tanto a nivel económico como para nuestra salud, mejorando nuestras vidas y protegiendo el medio ambiente. Hay dos formas principales de actuar frente al cambio climático: una, que resulta imprescindible, es la reducción de las emisiones y la otra, la adaptación al mismo. 

Por otro lado, es fundamental aplicar planes de prevención para las olas de calor, que cada vez son más frecuentes e intensas. Desde que empezaron a aplicarse los planes de actuaciones preventivas ante temperaturas extremas, se ha conseguido reducir la morbilidad y generar una "cultura del calor" entre la ciudadanía. 

Si comunicamos sobre cambio climático con un enfoque de salud y utilizamos ejemplos que incluyan evidencia científica, cambios, consecuencias y sobre todo beneficios de la acción climática, nuestro mensaje será más efectivo y tendrá más repercusión en la población.

El Plan de actuaciones preventivas por temperaturas extremas en Aragón es el plan del calor a nivel autónomico. En nuestra región, el cambio climático supone un incremento de la aridez y de los incendios forestales , además de un aumento de las temperaturas extremas, y una disminución de las precipitaciones y de la cobertura de nieve.  Hay estudios científicos que demuestran que las temperaturas extremadamente altas inciden sobre la mortalidad por enfermedades cardiovasculares y respiratorias. 

En el año 2004 se inició en nuestro país el Plan Nacional de Actuaciones Preventivas de los Efectos del Exceso de Temperaturas sobre la Salud. A partir de este plan las comunidades autónomas empezaron a elaborar sus propios planes. El actual Plan - tanto a nivel nacional como autonómico - abarca desde el 15 de mayo hasta el 30 de septiembre. Además, este año, como novedad, se presentan la zonificación por regiones isoclimáticas como unidades de control y seguimiento. Así pues, en el Plan coexisten la zonificación isoclimática y la provincial. Aragón tiene 9 zonas isoclimáticas, tres por provincia, lo que permite que las alertas sean más reales en cada zona y por tanto más efectivas.

Es importante distinguir el término de alerta meteorológica del de alerta por riesgo para la salud. El nivel de alerta para la salud lo proporciona el Ministerio de Salud y es diferente del que ofrece la AEMET. Para la Organización Munidal de la Salud (OMS) los niveles umbral para las temperaturas deben basarse en los riesgos para la salud,  no en las condiciones meteorológicas que indica AEMET.

Las muertes atribuibles al calor son las que se producen por el agravamiento de patologías previas. Las muertes por calor son las que se producen por golpes de calor, es decir, como consecuencia de la exposición prolongada al calor o por realizar un gran esfuerzo físico en altas temperaturas.

Por ello, es importante avisar a la población para intentar prevenir todas las muertes atribuibles al calor posibles. Esto se hace mediante actividades de promoción e información tanto en la red sanitaria como con la población (campañas en medios de comunicación, difusión de información, etc.); y mediante la activación de alertas, que se envían a los agentes involucrados. Ellos  son los que realizan la intervención directa con la población, especialmente con la población vulnerable.

• En la sección de Recursos y Herramientas puedes encontrar los Planes de Calor estatal y autonómico.