Si tienes más de 25 años y quieres confirmarte, nos alegramos de tu decisión.

1. Porque puedes aprovechar la preparación para el sacramento volviéndote a sumergir en la riqueza de tu bautismo. ¿Sabías que Cristo recibió la unción del Espíritu Santo con unos treinta años? Eso te hará parecerte más a él. ¿Has pensado qué aspecto de la personalidad de Jesús te atrae más?

2. Además, tendrás oportunidad de unirte más fuertemente a la familia de la Iglesia. ¿Recuerdas el nombre de algún santo? ¿Y conoces su vida? Puedes buscar en la wiki... de verdad, hay vidas fantásticas. A esas vidas queremos unirnos.

3. Y luego, esto de confirmarse no es sólo un papel para ser padrino (con la única importancia afectiva que la que tiene el diploma de un hijo en el día del padre). El Espíritu Santo envió a Jesús a acercarse a los marginados, a atender a los enfermos, a amar acogiendo a pecadores... ¿Habías pensado que tu compromiso por la justicia y el amor es el fruto de tu confirmación?

Por eso nos alegramos infinitamente de que quieras plantearte la confirmación como una nueva manera de desarrollar lo que ya eres. Ánimo, inscríbete.

Tendremos al menos dos grupos: los jueves a las 20:00 y los sábados a las 20:15 en la Parroquia de Santiago (C. Estrella)