¿Cómo se juega?

1. Reparto de cartas: Al inicio, se reparten 7 cartas a cada jugador. El resto de las cartas se colocan boca abajo en el centro de la mesa, formando el mazo de robo. La primera carta del mazo se coloca boca arriba junto a él, iniciando así la pila de descarte.

2. Turnos: Los jugadores van turnándose para descartar una carta de su mano. Para poder descartar una carta, esta debe coincidir en número o color con la carta superior de la pila de descarte. Por ejemplo, si la carta superior es un 5 rojo, puedes descartar cualquier 5 de otro color o cualquier carta roja, independientemente del número.

3. Cartas especiales: Además de las cartas numeradas, existen cartas especiales que pueden cambiar el curso del juego:

   • Roba dos (+2): Obliga al siguiente jugador a robar dos cartas y perder su turno.

   • Reversa: Invierte el sentido de juego.

   • Salta: El siguiente jugador pierde su turno.

   • Comodín: Puedes ponerlo en cualquier momento y cambiar el color que se está jugando.

   • Comodín +4: Igual que el comodín, pero además obligas al siguiente jugador a robar cuatro cartas.

4. "Uno": Cuando solo te quede una carta en la mano, debes gritar "¡Uno!" antes de que otro jugador te lo recuerde. Si olvidas decir "Uno" y otro jugador te descubre, debes robar dos cartas como penalización.

5. Ganador: El primer jugador que se quede sin cartas gana la ronda.

Puntuación:

Al final de cada ronda, los jugadores suman los puntos de las cartas que les quedan en la mano. Las cartas numeradas valen su valor nominal, las cartas de acción valen 20 puntos y los comodines valen 50 puntos. El primer jugador que llegue a 500 puntos gana la partida.