Isabel II de Reino Unido

Y todo comenzó con un viaje...

Muchos de nosotros tenemos ídolos o famosos a los que acompañamos en su día a día para ver qué hacen, con quién están...En definitiva, para conocer su figura y admirarla cada vez más. Sin embargo, estas personalidades no pueden durar eternamente. Cuando esto ocurre, nos planteamos cómo llegamos a interesarnos por su figura y qué podemos hacer para honrar su memoria. Esto mismo me pasó a mí.

Ayer, 8 de septiembre del 2022, muchos de nosotros conocimos la noticia del fallecimiento de Su Majestad, la Reina Isabel II de Reino Unido. Todo el mundo quedó conmocionado por la pérdida de este titán de la Historia.

Mi pasión por esta figura comenzó en el verano de 2018 cuando fui un mes a Londres (capital de este antiguo imperio de ultramar) para mejorar mi inglés. Al llegar, quedé maravillado por la arquitectura londinense, sus calles rebosantes de historia, el famoso Támesis custodiado por la imponente y antigua Torre de Londres mandada construir por Guillermo "El Conquistador" (rey de Inglaterra de 1066-1087) al arquitecto y obispo Gundulf de Rochester; el Big Ben; y el London Eye. Tras esta intensa panorámica, no sabía qué más esperar...pero la cosa no hizo más que mejorar.

Un día, tuve mi primer encuentro regio a través de la línea de metro. Esta última recibía el nombre de "Victoria line" en referencia a la antigua reina de este país. Después, llegué a la estación de tren en la que tenía que verme con mis compañeros: Euston Station. Allí, en la parte principal del edificio en el lado derecho cerca de las escaleras mecánicas, se localizaba una placa donde decía que esa estación había sido inaugurada por la reina Isabel II en ¡1968! Al verla me quedé anonadado porque...¡la mismísima reina había estado allí! Poco más tarde, fuimos a conocer más a fondo las calles del país de Harry Potter llegando a la residencia oficial de Su Majestad en ese momento: Buckingham Palace. A pesar del gentío que se agolpaba en las verjas del recinto para ver el cambio de guardia, pude observar el edificio. Era enorme, sobrio, pero elegante. Pasamos por la fachada principal donde pude ver brevemente a la Guardia Real de la Reina con sus icónicos gorros de piel y sus chaquetas rojas...¡increíble!

El Puente de Londres

El London Eye

Buckingham Palace

Buckingham Palace

Otro de los días, visitamos la icónica Torre de Londres. Este lugar, temido en otros tiempos por sus sangrientas leyendas, ahora se convertía en un museo para conocer la historia de este edificio. En su interior, se podían ver los distintos animales que vivieron en la "Torre" antes de ser trasladados a principios del siglo XX al zoológico de Londres gracias a unas estatuas de que los recordaban (leones, elefantes, tigres...). Durante la travesía, vimos distintas estancias y habitaciones de reyes, jardines, otras alcobas...hasta los únicos animales salvajes que aún habitan aquellos parajes: los cuervos. Y...aunque no tuvimos la oportunidad, pude observar los imponentes muros que protegían las "joyas de la Corona". Además, en el recinto había un imponente medallón con el busto de un león coronado y el nombre de Isabel II.

Panorámica de la "Torre de Londres"

Horas más tarde, fuimos al museo de cera Madame Tussauds. Allí, había estatuas de famosos a tamaño real hechos en cera: Harry y Meghan, John Wayne, Steven Spielberg, Donald Trump, Nelson Mandela...hasta ver que en una de las salas estaba al completo la ¡Familia Real Inglesa! con la que podíamos sacarnos una foto. Animados por esto, en grupo nos hicimos la foto para tener un recuerdo de nuestra estancia en Londres. Fue una experiencia muy curiosa y divertida pues yo me coloqué al lado de Su Majestad...ja, ja, ja.

Y así, poco a poco los días fueron pasando y veíamos más carteles con el nombre de la reina, sus residencias...y hasta estaba en los billetes y monedas. En definitiva, fue un viaje maravilloso donde además de aprender inglés y conocer a gente de otras partes de España y del mundo, me pareció aún más espectacular la figura de Isabel II del Reino Unido.

Desde ese año, 2018, hasta hoy me sigue pareciendo fascinante. Una mujer que no debía haber sido reina, pero que de acuerdo a las circunstancias del momento lo fue dando lugar a lo que me atrevería a llamar la "Nueva Era Isabelina".

Figura del cera de Sir Winston Churchill

Figura de cera de Su Majestad Isabel II de Reino Unido

Un cronista moderno con un soldado de la Guardia Real y Guillermo Shakespeare en la tienda LEGO de Londres

Isabel Alejandra María nació el 21 de abril de 1926 en Londres, Inglaterra. Hija de Jorge VI de Inglaterra y la reina consorte Isabel. Fue una mujer cuyo destino no era regir la nación inglesa; sino ser miembro de la familia real inglesa, tener una familia y dedicarse a los caballos y sus queridos corgis. No obstante, el destino es caprichoso y su vida cambio en 1936 con la abdicación de su tío David, más conocido como Eduardo VIII de Reino Unido. De esta forma, el padre de Isabel, Alberto Frederick Arthur George, se convirtió en rey y último emperador de la India. Eligió llamarse Jorge VI de Inglaterra. Y así, su hija pasó a ser la princesa de Gales y heredera al trono de Reino Unido.

Recibió junto con su hermana Margarita una educación privada en su casa. Posteriormente, especialmente Isabel, estudió Historia y Derecho Constitucional; además de baile e idiomas en Buckingham Palace. Conoció cuando todavía era muy joven (en 1939) a un tal Felipe de Battenberg en la academia naval de Dartmouth (Devon, Inglaterra). A partir de ese encuentro, se fueron carteando aunque se conocían al ser primos terceros (compartían de antepasado a Victoria I de Inglaterra). Finalmente, se casaron en 1947 siendo su boda. De ahí, disfrutaron de su luna de miel y varios años en la isla de Malta hasta que por la salud de Jorge VI regresaron a Inglaterra. Allí, tras una operación al rey, la princesa Isabel junto con su marido, Felipe, realizaron su primera gira por África.

Su vida cambiaría en enero de 1952 cuando Jorge VI de Reino Unido murió como consecuencia de un cáncer de pulmón. De esta forma pasó a ser Isabel II de Reino Unido. Fue coronada el dos de junio de 1953 en la abadía de Westminster. Además, fue televisada y vista por todo el mundo.

Su Majestad ha reinado durante setenta largos años. Además, los “70” recién cumplidos este año y celebrados en el “Platinuum Jubilee”. Como consecuencia de esto, se ha convertido en el monarca que más años ha ocupado el trono inglés; y la más longeva al llegar a los 96 años. Sin embargo, no todo puede durar eternamente y así…nos ha dejado para reunirse con su marido y su familia. Desde allí arriba seguro que cuidará y protegerá al pueblo de Reino Unido junto a su "beloved" marido Felipe de Edimburgo.

Tan solo puedo terminar esta entrada diciendo:

God bless The Queen y God save The King


C.M.