La investigación científica es rigurosa organizada, dinámica, cambiante, evolutiva y se lleva acabo cuidadosamente, este tipo de investigación cumple con propósitos como: resolver problemas, producir conocimientos y teorías (Hernández, 2014).

Por tal motivo, es imprescindible que al momento de revisar la documentación que apoye los antecedentes teóricos del tema de nuestra investigación, estos se basen en artículos, tesis de grado o libros, los cuales nos brinda confianza y soporte científico en su contenido.