Evaluación del proyecto

Entendemos que el aprendizaje es un proceso, no es la evaluación de un momento puntual. Por ello, la evaluación se basa en las Pruebas de Evaluación Continua (PEC), que empiezan el día que comienza la unidad y terminan el día que la entregan. Se trata de un conjunto de ejercicios que ponen en relación los aprendizajes del aula con los contenidos del libro y la realidad actual. Para realizarlos, los grupos de alumnos pueden usar cualquier material y fuente de información, por lo que la discriminación de la información fiable y la selección de fuentes se convierte en parte esencial del proceso de aprendizaje, siendo competencias básicas en las personas autónomas y críticas.

Es posible que, durante el desarrollo de la unidad, surjan dudas o curiosidades que plantean los propios alumnos o los docentes y que llevan la materia a un plano más real y cercano al alumnado. Estas preguntas las llamamos Pins, son voluntarias y suman puntos en las PEC, pues se entiende que el alumnado realiza el mismo ejercicio de aprendizaje que el propuesto en las pruebas de evaluación.

Una vez al trimestre, los alumnos se tienen que enfrentar a una Prueba de Síntesis (PS), en la que se les preguntarán ejercicios relacionados con las PEC (ya elaboradas, corregidas y trabajadas). En estas pruebas, los alumnos solo pueden acceder a la información que han elaborado previamente, de ahí la importancia de hacer conscientemente y de forma autónoma el proceso antes mencionado de acceder a la información y analizarla.

El portafolio de la materia y la actitud participativa y activa son parte esencial del proceso de enseñanza-aprendizaje, pues se entiende que son mecanismos por los que el alumnado podrá acceder más fácilmente a los contenidos y a la información que se considera necesaria para el desarrollo de las actividades. Se adjunta un modelo de PEC de los dos primeros cursos de la etapa:

La evaluación del proyecto se sustenta en estas pruebas de evaluación, pero pretende ir más allá con la evaluación de parámetros más abstractos e intangibles, como la actitud proactiva del alumnado hacia la práctica de la materia en términos de colaboración, involucración y cooperación. Por ello, se plantea la siguiente rúbrica de evaluación, en la que se ofrece al alumno la posibilidad de autoevaluación, siendo así consciente del proceso que está realizando y poder buscar opciones de mejora junto con los docentes.

Se recuerda que la nota final de la asignatura es la media aritmética de las tres evaluaciones, integrándose el proyecto en esta baremación.