Semblanzas

"El paisaje ocupa el trabajo pictórico principal de Rafael Fernández, evidenciando conocimientos de realizaciones ajenas, a las que sabe dar su personal sello inquieto y disciplinado al mismo tiempo."

Rafael Prats Rivelles

"Rafael Fernández se expresa con plena espontaneidad abordándola mediante amplia y segura pincelada, con soltura, y sin asomo de perfiladas insistencias. Antes al contrario, algunos trazos, apenas insinuados, sirven para subrayar, justa, medidamente, con efectiva eficacia, el valor adecuado a cada uno de los elementos que integran el conjunto. Para ello el artista se sirve de una gama limpia, alegre y luminosa. Y como todo ello viene condicionado por unas excelentes dotes de dibujante, el resultado es evidentemente positivo."

Rafael Alfaro


"Rafael Fernández evidencia un proceso artístico en el que el distinguido pintor y catedrático avanza con notables resultados: el color se empasta con mayor libertad y una línea sobria y sin concesiones gratuitas pone en pie unos lienzos de positivo mérito que plasman un quehacer abordado y rubricado con estimulante nervio."

Eduardo López Chavarri

Título: Lenguaje gráfico (A Rafael Fernández, mi padre, pintor y catedrático, como a él le gustaba)

Autor: Rafael V. Fernández Bas

Valencia, 14 de diciembre de 2014.

Como ha quedado no me convence,

habría que darte un toque y encontrarte

el punto que te falta y rematarlo, si puedo,

con el matiz, la pincelada, hacerlo sin miedo

y acabarlo. ¡Cómo se alarga el proceso del arte!

La duda asalta, la insatisfacción le vence

a la originalidad del lenguaje gráfico.

¡Qué solo está el lienzo! Sin los colores me enredo

y el dibujo se diluye entre aulas donde se imparte

tanta inútil enseñanza de geométrica escritura,

un libro de texto ahoga sus líneas hasta que comience

la teoría visual del campo con su carga de escultura.

Me apabullan las contradicciones por la falta de frescura,

por esa ejecución meditada de racionalidad dura.

Es más trágico que pictórico poder ganarte

a pulso la superación de la técnica pura.

Es oficio, no es plagio, es afán sin denuedo,

es voluntad creativa, vanguardia de cultura,

educación de estética, pudor de catedrático,

pánico expresivo, expresionismo fotográfico.

El trazo de pintura se disuelve en estructura,

la vida de la fauna se escapa del duro tráfico

Suave nubosidad de ocres tierras aparte,

perspectiva cónica, un cromatismo sin dulzura,

palmeras ondulantes al viento entre flores de viñedo,

música de fondo en la marina más oscura.

Contemplo el retrato de familia que comparte

la plácida luz del salón en el hogar iconográfico.

Y no puedo seguir viviendo así, tan fatídico.

Sin ánimo vehemente me tiembla el dedo,

la mano dormida, las ideas en negra albura

se ocultan en la anciana soledad madura.

No te olvides, mujer, que nunca dejé de amarte

y aprended, hijos, que vivir es un esfuerzo titánico.

Embebido de amargura, a la cruel moda no cedo

por mi abstracta visión efímera de cualquier parte.

Paralizado por la indiferencia del juicio crítico,

me hundo en ese paisaje urbano de triste figura.

.

"Sus talentos de dibujante y de maestro de la materia, son cosas que circulan como moneda bien acuñada en todos los círculos artísticos. Rafael Fernández aborda los problemas más

difíciles e incluso gusta de creérselos él mismo viendo los paisajes desde su ángulo personal y expresándose con una excelente sintaxis de pintor."

Carlos Sentí

"Rafael Fernández, hombre observador y sensible, de visión aguda, que sabe sintetizar las formas con gran precisión. Ante su obra se hace innecesario todo historial, porque importa poco saber de exposiciones y galardones. Su muestra, en la que predomina el paisaje, es interesantísima. Exposición de auténtica calidad, y de gran dignidad artística, que no se puede visitar al paso, ya que cada cuadro nos obliga a detenernos, a estudiarlo y analizarlo, a sentir la viva emoción que proporciona. Porque tiene espontaneidad y fuerza que cautivan. Pintor ambicioso que huye de la comodidad para plantearse problemas de toda índole que luego resuelve con holgura sorprendente. Traduce plásticamente sus mociones con estilo depurado, con sinceridad, con gran honestidad profesional. Con todas estas cualidades logra una

obra magnífica, tanto objetiva como subjetivamente. Porque sus cuadros son gratos, tienen calidad, belleza y emoción."

Gonzalo Puerto

"Su diálogo con la naturaleza es, al fin y al cabo, un diálogo entre él mismo y la pintura. Encuentra una apasionante impetuosidad en la naturaleza, produciendo con ello un arte sintético y observador.

El poder simbólico de los colores permite las conexiones íntimas, las correspondencias, las analogías y la armonía oculta con aire de solidez.

Los cielos en sus cuadros están formados por planos como los terrenos y contribuyen al movimiento y efecto del cuadro.

Su estilo cambia, se vuelve más impetuoso, más nervioso y se inclina por una diversidad de estilos en un mismo cuadro.

Así que tenemos ante nosotros, perdurable y permanente como sus mismos paisajes, el depósito expectante del arte de este hombre que nos asombra con sus nuevas creaciones"

Rafael Pérez Zarapico

“En los paisajes de Rafael Fernández, bajo el esplendor atmosférico, hay una emoción lírica, íntima, de calidad poco frecuente, sobre todo en los colores densos, que le son tan predilectos. Algunos de sus cuadros -bodegones, flores y paisajes- son un auténtico festival cromático, de empaste goloso y abundantes matices. Posee conocimientos y cualidades en la línea que cada cuadro le pide. Sus cuadros, así, alcanzan la riqueza pictórica que tienen que tener y da medida de la dimensión profesional del artista."

María Francisca Olmedo de Cerdá

"Descubrir ahora a Rafael Fernández en Valencia sería como descubrir el Mediterráneo en la Malvarrosa. Se trata de un gran pintor que ha dado muchas pruebas de su talento. Y las repite constantemente, porque sabe que en arte hay que empezar siempre desde cero y que las conquistas anteriores no valen de nada a la hora de empezar un cuadro nuevo.

Por eso tal vez las obras se muestran tan distintas entre sí, por eso un lienzo nos puede parecer un ejercicio de ascetismo del color, hasta casi quedar en el terreno de lo monocromático, mientras el cuadro de enfrente se acerca a las fronteras del "fauvismo".

Buscar, buscar siempre. Esa es la norma de peregrino que parece impuesta al artista por su temperamento y que en Rafael Fernández, de cuya vocación temperamental en absoluto se puede dudar, es una constante."

Carlos Sentí

"Exposiciones como la de Rafael Fernández corren un cierto riesgo de desconcertar al visitante. Y no se trata, en absoluto, de falta de calidad. Pero el autor hace gala de un tan profundo mimetismo, de una capacidad de asimilar cualquier tendencia y ponerla en práctica, que resulta difícil orientar y casi imposible precisar, su estilo propio. En ello influye, probablemente, la cuestión de su docencia.(...)

Azpeitia

Coincidiendo con la inauguración de las obras expuestas en el Instituto Laboral por su profesor, Fernández Martínez, publicó el diario ABC un artículo de Francisco Javier Martín Abril que se tituló: "Saber elegir" en el cual se expresa con las siguientes palabras: "En la actualidad se ha complicado tanto la vida, hay en la vida tantas cosas interesantes, atractivas y bellas, que brota en nosotros con frecuencia la perplejidad..." Igualmente se pueden aplicar los anteriores conceptos al momento actual de la pintura, con sus diversas tendencias y escuelas. Mas en la obra que nos presenta Rafael Fernández, si bien es difícil elegir, lo es por el concepto acabado y fino de su técnica, así como por la acertada selección de motivos que ha "llevado a sus lienzos."

Luis Calvo

"Rafael Fernández se enfrenta con el paisaje para hacerlo comprender en su realidad embellecida, de calma y sugerencias vitales. Sus óleos tienen consistencia de materia que es exaltada por un armonioso pulso cromático. Encantan los trazos del pincel y la espátula que pasan por las gradaciones de los colores primordiales y dan a los cuadros un lenguaje orquestal armonioso. Cuadros que revelan un temperamento vibrante y buceador en el misterio de la belleza escueta, de la naturaleza viva y la "muerta", pues tanto en los paisajes como en los bodegones y las figuras, Rafael Fernández se acredita como amador y dominador de la pintura."

Juan Latino