Muchas personas tienen el vello débil en la zona de las cejas y, por tanto, se ven obligadas a pintarse a diario las cejas para poder darse forma y conseguir una expresión y unas facciones mucho más bellas.
Pero maquillarse cada día, al final, termina siendo un proceso engorroso y cansado, por este motivo, en Vanitas Espai ponemos a tu disposición un tratamiento definitivo para que nunca más tengas que pintar tus cejas: la micropigmentación.
La micropigmentación es también conocida como maquillaje (semi)permanente y se trata de la deposición de pigmentos orgánicos justo por debajo de la piel, dotándola de color permanente. Para que te hagas una idea, vendría a ser como una especie de tatuaje.
La micropigmentación es utilizada para embellecer y/o corregir rasgos faciales. Con ella se pueden realizar cejas artificiales, por ejemplo, sobre todo en personas que las han perdido a causa de la edad, una enfermedad o algún tipo de desajuste genético; así como para disfrazar cicatrices y otro tipo de marquitas de la piel y/o quemaduras.
Se trata de un método con el que se inyectan pigmentos muy pequeños bajo la piel para cubrir cualquier zona y, así, conseguir que tus cejas se vean perfectamente cubiertas, frondosas y pobladas. Es una técnica muy sencilla de hacer, apenas indolora y cuyos resultados son impresionantes.
Esta técnica requiere del uso de agujas, ya que depositan el pigmento a nivel epidérmico, por lo que después de realizar el tratamiento, la zona afectada va a inflamarse y, al cabo de unas horas nos saldrá una costra que caerá pocos días después. Todo esto hace que el resultado sea mucho más intenso de aquello que buscábamos al inicio, pero en cuestión de una semana, todo esto va a ir desapareciendo.
Es más, en un mes el proceso de fijación del pigmento se habrá completado, produciéndose una pérdida progresiva del mismo, dependiendo del tipo de piel. Es por ello que pasado este tiempo, realizaremos un repaso, que ya nos va a durar un año y medio aproximadamente, según cada caso.
No te asustes, porque para evitar el dolor, se suele aplicar crema anestésica antes de comenzar el procedimiento. Depende de la zona a tratar y de lo sensible que tu seas, pero nuestros profesionales se van a encargar de que no sea una experiencia para nada desagradable.
Deberás hidratarlas a diario para obtener el resultado deseado. Para ello, te recomendamos que uses vaselina pura (sin perfumes ni colorantes) o cremas hidratantes ricas en vitamina A y D o aceites esenciales que contengan vitamina E, así, conseguiremos que la ceja esté siempre nutrida y humectada y, por tanto, no se reseque ni se escame.
Debes hidratarlas de 3 a 5 veces al día (mañana, media mañana, tarde, media tarde y noche)
La micropigmentación puede producir una leve hinchazón o rojez en la zona. Esto puede combatirse fácilmente con la aplicación de hielo en la zona a tratar puesto que este producto tiene propiedades antiinflamatorias que te permitirán sentirte mejor.
Para ello, bastará con que cojas un poco de hielo, lo envuelvas en un paño y lo apliques sobre la ceja durante unos 5 o 10 minutos. En el caso en el que te vuelvan a aparecer algunos dolores, puedes volverte a aplicar hielo, siempre y cuando hayan pasado 45 minutos pues, de lo contrario, podrías quemar la piel.
Eso sí: después de cada uso de hielo, es importante que hidrates la zona
Debes evitar rascarte la zona ¡por mucho que pique! Ten en cuenta que es normal que sientas picores en esta parte del rostro porque la piel se estará cicatrizando y curando del tratamiento pero, aunque sientas picor, deberás evitar rascarte.
Tampoco deberás eliminas las pieles muertas que puedas ver porque podrías modificar la micropigmentación y provocar que el resultado no sea el que buscabas. Si sientes unos picores muy intensos, prueba a mojarte la zona con agua o aplicarte hielo y, así, notarás cómo las molestias desaparecen.
La zona podría infectarse debido a que es habitual que en los productos de maquillaje se acumulen bacterias que puedan infectar la ceja. Así que, evita usar cualquier tipo de maquillaje hasta que tu ceja no se haya cicatrizado al 100%.
Deberás lavarlas a diario para evitar que la suciedad de acumule en la zona y, por tanto, haya peligro de infección. Debes lavarte 3 veces al día (mañana, tarde y noche) pero sin restregar ni frotar la zona tratada, bastará con que te eches agua con un poco de jabón neutro y, después, te seques con la toalla o papel sin frotar, dando pequeños toques para eliminar el exceso de humedad.
Después del lavado hay que hidratar la zona para evitar que se escame, se irrite o se reseque la piel.
Durante la primera semana posterior a haberte realizado un tratamiento de micropigmentación es importante que te protejas al máximo de los rayos UVA aunque, lo más recomendado, es que de 3 a 6 semanas estés completamente protegida del sol para evitar que el color pueda modificarse. Ten en cuenta que el contacto con los rayos solares podrían estropear los pigmentos introducidos en tus cejas y, por tanto, modificar tanto la coloración como el resultado final.
Si te haces la micropigmentación de cejas en verano debes tener en cuenta que no podrás bañarte ni tomar el sol pues podrían afectar al resultado. El cloro y las bacterias que se hallan en zonas públicas como piscinas, mares o lagos pueden penetrar en tu herida y producir una infección en la ceja pero, además, la herida deberá estar totalmente cicatrizada antes de entrar en contacto prolongado con el agua
Precio: 249€
*el precio incluye el repaso obligatorio pasado 30 días*
Duración: 3 horas aproximadamente