La Crismación es un Sacramento para recibir al Espíritu Santo. En la Iglesia Ortodoxa se recibe junto al Bautismo. Consiste en la unción del cuerpo con el Santo Crisma, un óleo bendecido por los obispos de la Iglesia.
Debe tomarse como gracia y deber. La gracia del regalo de los dones del Espíritu Santo y el deber de vivir una vida cristiana y de formarse en la Fe Ortodoxa.
Este sacramento es fundamental para recibir otros sacramentos como el Matrimonio o para llevar a cabo tareas cristiana como el padrinazgo o madrinazgo en Bautizos.