OPINIÓN
OPINIÓN | Luis Thais: Lava Jato y la ley del menor esfuerzo
Las declaraciones hechas por este personaje de la corrupción a tres fiscales peruanos y dos abogados de Humala no aporta nada nuevo excepto que los recursos vinieron desde la oficina creada para la corrupción que tenía o tiene aún esta empresa, es decir que viene de fuentes ilícitas y con ello complica la situación del expresidente. Sin embargo, aún hay abogados que sugieren que cuando recibió el Sr Humala estos recursos, no era funcionario público y por lo tanto no habría delito. El Poder Judicial determinara el resultado en un juicio que se le abrirá a la pareja presidencial por cuanto su esposa también estaría involucrada en el tema.
Tal vez, lo primero que debemos de decir sobre las declaraciones de Odebrecht es que es bastante positivo que la Fiscalía peruana sea la primera fiscalía extranjera que ha interrogado al empresario brasileño desde que este admitió, a finales del 2016, haber pagado US$ 29 millones en sobornos a funcionarios públicos peruanos. Si bien es cierto que todavía no ha caído ningún "pez gordo" (Toledo continúa prófugo), el Ministerio Público está probando que no es cierto que no le interese investigar el caso Odebrecht ni que proteja a los corruptos.
La última encuesta de Ipsos y El Comercio ha puesto en números lo que ya se venía percibiendo hace buen rato en el ambiente de la opinión pública: 92% de los entrevistados cree que Ollanta y Nadine recibieron plata de Odebrecht y solo 2% piensa que la gigante brasileña no coimeó en el periodo de Alan García.
Como sociedad hemos sido testigos en los últimos años, de destapes de políticos de toda clase y partido, autoridades y hasta personas individuales involucradas en actos de corrupción. Hemos visto, incluso, una carta de compromiso de la empresa Graña & Montero prometiendo realizar buenas prácticas, producto del desplome de sus acciones a raíz del escándalo de Odebrecht. Gesto que muchos dudamos sea sincero, más allá de la medida producto de la crisis que tiene la millonaria compañía. En las calles, el peruano de a pie desconfía de sus autoridades, incluso de las que encuentra en las calles como los policías. Esta ruptura durará años en resolverse, aún así, debemos intentar mantener la unidad y trabajar por un mejor mañana para todos.
Oí este chiste de humor negro: la constructora más grande del mundo está a punto de concluir su mayor obra. ¿Cuál será? Su propia tumba. El autor del lúgubre proyecto sería Marcelo Bahía Odebrecht, la cabeza de la que, en el 2010, fue elegida la mejor empresa familiar del mundo por el International Institute for Management Development (IMD), la célebre escuela de negocios de Suiza.
¿Por qué quien encarna la tercera generación de una gran empresa y quien ha sido responsable de llevarla a su mayor expansión global, y a sus mayores estándares de tecnología y sostenibilidad ambiental, es también quien termina por sepultar su reputación?
Hoy a las 4 p.m. posiblemente estalle otra bomba nuclear en el Perú, pues Marcelo Odebrecht responderá a esa hora y en Brasil las preguntas que le formulará el fiscal peruano Germán Juárez. Si bien se afirma que las interrogantes se concentrarán en la entrega de varios millones a los Humala, supongo que no debe haber ninguna restricción para que nuestro fiscal le pueda preguntar sobre cualquier tema, por lo que me imagino que varios deben estar temblando aquí. Ojalá nomás que Marcelo responda y no se ampare en el silencio. Y ojalá que ese interrogatorio se haga público, que sería terrible que la Fiscalía siga con sus secretismos.