Esta crisis ha marcado el fin del periodo de supremacía económica británica

La depresión de este último año ha influido en el algodón, el carbón la siderurgia y el ferrocarril. ``La fábrica del mundo´´ parece agotarse y otros países toman el relevo. El libre cambio fue efímero y ha dejado una profunda huella en las economías. Esta crisis es fruto de una profunda crisis industrial y también agraria. Agotándose el empuje del primer ciclo industrializador-el del algodón el vapor y el ferrocarril- son muchos los países de Europa y fuera de ella se están incorporando mejor o peor a la nueva economía industrial.

La producción había crecido tanto en algunos sectores que se crean situaciones de exceso de oferta. La agricultura europea sufre en muchos países la competencia de productos (cereales, lana) más baratos que llegan

desde Ultramar, a borde de transportes cada vez más baratos. La difusión de las doctrinas y políticas librecambistas habían permitido un crecimiento sin precedentes del comercio internacional.

Esta especialización internacional según la estadística británica comenzará a considerarse una gran amenaza cuando amenace con arruinar a los agricultores de distintos países. Según la estadística británica la salida de la crisis, marcará un antes y un después en la historia.

También la abundancia de máquinas hace caer los precios del mercado, esto va suponer una gran cantidad de conflictos sociales. Otro cambio que se produce es una caída de los precios de los productos industriales todo esto provocado por la superproducción.