PROYECTO

Generando un clima de confianza en el colegio

Las personas que incurren en los diferentes tipos de violencia, independientemente de su edad, en muchos de los casos lo hacen por desconocimiento. Por paradójico que parezca no todos son conscientes de que sus acciones caen en algunas de las clasificaciones de violencia, lo que es más grave aún, es que el que la recibe tampoco sabe que está siendo violentado de alguna forma.

Que los alumnos de 2o grado de secundaria del Instituto Progreso y Esperanza, conozca la definición y las variantes de la violencia, con la finalidad de reconocer en su comportamiento y en el de las personas con quien convive, este tipo de conductas que obstaculizan la sana convivencia y tome las medidas necesarias para cambiar estas respuestas por otras más asertivas.

La violencia en todas sus formas, se está convirtiendo en una forma de respuesta a las diferentes situaciones que enfrentan día a día los adolescentes en casi todos los ámbitos en donde se desenvuelven. El ambiente escolar no escapa a esta situación y, siendo uno de los espacios en los que pasan gran parte del día, la convierte en una prioridad que atender, de tal manera que su estancia en la escuela pueda favorecer la empatía, que genere una sana convivencia y un sitio libre de violencia.

Se trabajará con alumnos del Instituto Progreso y Esperanza, sección secundaria, 2o grado en el ciclo escolar 2016-2017.

MARCO REFERENCIAL

La violencia existe desde siempre; violencia para sobrevivir, violencia para controlar el poder, violencia para sublevarse contra la dominación, violencia física y psíquica.

La agresividad del niño, asimismo, puede ser estimulada por el rechazo social del cual es objeto o por una simple falta de afectividad emocional, puesto que el problema de la violencia no sólo está fuera de nosotros, en el entorno social, sino también dentro de nosotros; un peligro que aumenta en una sociedad que enseña, desde temprana edad, que las cosas no se consiguen sino por medio de una inhumana y egoísta competencia.

Según el psicólogo Robert R. Sears, los niños que sufren castigos físicos y psíquicos son los que demuestran mayor agresividad en la escuela y en las actividades lúdicas, que los niños que se desarrollan en hogares donde la convivencia es armónica. Para Sears, como para los psicólogos que se prestaron algunos conceptos del psicoanálisis, la agresión es una consecuencia de las frustraciones y prohibiciones con las cuales tropiezan los niños en su entorno. Cuando el niño reacciona con agresividad es porque quiere manifestar su decepción frente a la madre o frente al contexto social que lo rodea.

Con todo, la discusión sobre el carácter innato o adquirido de la violencia humana, por ser motivo de controversias, tomará demasiado tiempo antes de alcanzar su punto final, debido a que, a diferencia de Rousseau, Bandura, Lewis y otros, el filósofo inglés Thomas Hobbes, tres siglos antes que Sigmund Freud, sentenció que la humanidad tiene una agresividad innata. Mucho después, los etólogos Konrad Lorenz, Karl Von Frisch y el holandés Nikolaas Tinbergen, comparando la conducta animal y humana, detectaron que la agresividad es genética, y que el instinto de agresión humana dirigido hacia sus congéneres es la causa de la violencia contemporánea.(Teorías de la Violencia Humana. Víctor Montoya, Razón y palabra 2006, 11 (53)).

HIPÓTESIS DE TRABAJO

Consideramos que los alumnos del Instituto Progreso y Esperanza desconocen la definición de violencia y su variantes, razón por la cual no identifican las formas sutiles de violencia en las relaciones cotidianas con sus compañeros en el colegio.

FUENTES DE INFORMACIÓN

1) Facultad de psicología. UV. (2014). Violencia y salud mental. 21 de marzo de 2017, de Universidad Veracruzana Sitio web: http://www.uv.mx/psicologia/files/2014/11/Violencia-y-Salud-Mental-OMS.pdf

2) Montoya, V; (2006). Teorías de la Violencia Humana. Razón y Palabra, 11(Recuperado de http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=199520728015)

3) Periódico “La Jornada”

ORGANIZACIÓN Y RECURSOS