Maldita Delmira Agustini

En tus ojos

Ojos á toda luz y á toda sombra!

Heliotropos del Sueño! Plenos ojos

Que encandiló el Milagro y que no asombra

Jamás la vida... Eléctricos cerrojos

De profundas estancias; claros broches,

Broches oscuros, húmedos, temblantes,

Para un collar de días y de noches...

Bocas de abismo en labios centelleantes;


Natas de amargas mares nunca vistas;

Claras medallas; tétricos blasones;

Capullos de dos noches imprevistas

Y madreperlas de constelaciones...


¿Sabes todas las cosas palpitantes,

Inanimadas, claras, tenebrosas,

Dulces, horrendas, juntas ó distantes,

Que pueden ser tus ojos?... Tantas cosas


Que se nombraran infinitamente!...

Maravilladas veladoras mías

Que en fuego bordan visionariamente

La trama de mis noches y mis días!...

Lagos que son también una corriente...


Jardines de los iris! devorados

Por dos fuentes que eclipsan los tesoros

Sombríos más sombríos, más preciados...

Firmamentos en flor de meteoros;


Fondos marinos, cristalinas grutas

Donde se encastilló la Maravilla;

Faros que apuntan misteriosas rutas...

Caminos temblorosos de una orilla


Desconocida; lámparas votivas

Que se nutren de espíritus humanos

Y que el milagro enciende; gemas vivas

Y hoy por gracia divina, ¡siemprevivas!

Y en el azur del Arte, astros hermanos!