Normalmente iniciamos nuestro trabajo con una evaluación del niño o niña. Esta valoración puede ser más o menos extensa dependiendo de cada caso. Va desde una simple valoración donde se determinarán las necesidades del alumno en algunos aspectos del aprendizaje, a una evaluación psicopedagógica donde se hace un estudio completo de todos los procesos de aprendizaje. Con ella se determinarán las necesidades educativas individuales.
A partir de la evaluación inicial o psicopedagógica se obtendrán los indicadores a partir de los cuales se diseñará el programa de trabajo de reeducación.