Las pirámides no se construyeron en un día, LOGOlatría tampoco
El primer paso es el establecimiento del espacio donde llevar a cabo el stand. El espacio asignado a nuestro grupo fue el situado en la planta -1, enfrente del salón de actos "Ángel Rodríguez".
Es un espacio diáfano interior, con diversos elementos arquitectónicos: columna central, puerta gris, dos huecos, y 3 radiadores de pared. La iluminación del espacio es artificial en su mayoría. Y para dinamizar nuestro espacio contamos con 50 cajas de cartón, que podemos emplear de la forma que consideremos.
Frente a este espacio tan vacío se empiezan a hilar ideas que puedan, entre otras cosas, dividir el espacio y empezar a crear una "tienda" (nuestro objetivo desde el principio). Decidimos empezar a crear un muro con las cajas proporcionadas.
En ellas dibujamos siluetas semejantes a un hueso, las recortamos y embellecimos con cinta de carrocero. Una vez hecho esto, y para obtener la forma deseada debíamos realizar un corte en la mitad de 2 de ellas y encajarlas por medio del mismo. Así, conseguimos tener 22 soportes que fuimos encajando entre sí para obtener nuestra pieza estrella: El muro.
La réplica de la columna egipcia ha sido fundamental para dar forma al concepto y la distribución de nuestro stand. Inspirados en la arquitectura de los templos del antiguo Egipto, sirve para delimitar el espacio abierto con el que contamos. Este diseño estructura el flujo de visitantes y busca evocar la grandeza y el misterio de la civilización egipcia, transportando a quienes nos visitan a un templo milenario.
Para su elaboración, se unen 5 laterales de caja con cinta americana. Para darle una mayor estabilidad, en el interior de la circunferencia que se crea se rodea con alambre y se le introduce una piedra grande y bolsas de basura llenas de papeles y recortes que fueron saliendo del proceso del muro. Esta se termina con 2 cajas pequeñas montadas y cerradas y encima de ellas, uno de los huesos anteriores.
Todo ello se decora con la temática establecida y compone uno de los soportes empleados para dividir el espacio y delimitar el espacio.
El halcón, un animal de gran simbolismo en el antiguo Egipto, se encontraba estrechamente ligado al dios Horus, protector de los faraones, quien era representado con cabeza de halcón y cuerpo humano. Esta asociación no solo confería protección divina al faraón, sino que también reforzaba su autoridad y legitimidad. Asimismo, el dios del sol Ra, fuente de vida y energía, también se vinculaba con este majestuoso animal, siendo figurado con una cabeza de halcón coronada por un disco solar, un símbolo de su poder omnipresente y su capacidad para iluminar el mundo.
Esta representación dual del halcón se ha materializado en nuestro proyecto mediante la unión de diversas piezas de cartón encajadas entre sí. Esta técnica permite crear una figura tridimensional con una textura y una profundidad únicas, capturando la esencia del halcón y su simbolismo.
La puerta, revestida en cartón, exhibe una decoración de jeroglíficos de animales. Estos símbolos, establecen un diálogo al combinarse visualmente con los logotipos de diversas marcas, creando un puente entre el pasado milenario y el presente moderno. Esta fusión de iconografía antigua y diseño contemporáneo no es meramente estética; se integra de manera orgánica en una de las actividades interactivas diseñadas para cautivar y educar al público. De esta forma, los visitantes son invitados a descifrar el significado oculto detrás de los jeroglíficos y logotipos.
En el centro del espacio se dispone un mostrador ¿o un altar?, que preside el espacio. Este simboliza una pieza clave para el tema que nos ocupa. La ambigüedad entre mostrador y altar invita a la reflexión sobre la dualidad entre lo comercial y sagrado, dicotomía presente en la cultura egipcia y en la sociedad contemporánea.
En este mismo espacio se debe hacer especial mención a la caja registradora, estratégicamente ubicada sobre el altar-mostrador, actúa como un punto focal que subraya el concepto de tienda. Su presencia simboliza la dimensión comercial del marketing, un motor que, en última instancia, moldea una realidad donde los signos y las representaciones a menudo eclipsan lo auténtico. Este fenómeno encuentra un claro reflejo en la actualidad, donde elementos culturales significativos del Antiguo Egipto, incluyendo sus venerados animales sagrados, han sido simplificados y comercializados, reduciéndose a meros souvenirs turísticos.
El chacal, animal estrechamente vinculado al dios Anubis –la deidad del inframundo y protectora de los difuntos–, era representado con cabeza de chacal y cuerpo humano. Esta asociación simbólica surgió de la observación directa de los chacales merodeando por las necrópolis, los vastos cementerios del antiguo Egipto, en busca de carroña. Su presencia constante en estos lugares sagrados los convirtió en guardianes naturales del reino de los muertos, y su imagen se fusionó con la del dios que guiaba a las almas en su viaje al más allá.
La cabeza de Anubis para esta representación se ha elaborado mediante un modelo de piezas recortadas y ensambladas, siguiendo un diseño que replica fielmente la forma que se aprecia en la imagen inferior. El ensamblaje de las piezas no solo crea una estructura tridimensional, sino que también aporta una textura a la superficie de la cabeza.
Nuestro mapa conceptual cumple una doble función: En primer lugar, sirve como herramienta de apoyo para nosotros, el equipo, y, en segundo lugar, como guía para el público, facilitando la comprensión del concepto y el proceso creativo detrás de nuestra obra. Para hacer aún más completa la experiencia del público, en el panel de corcho, hemos dispuesto el cartel, el logotipo y presentación del equipo, junto con un calendario detallado de nuestras actividades.
Ofrece una visión clara y concisa del stand, al ilustrar la conexión que hemos establecido entre el pasado, a través de representaciones de animales venerados por los antiguos dioses egipcios, y el presente, mediante la selección de algunas de las marcas contemporáneas más reconocidas que incorporan animales en sus logotipos. Esta representación visual permite al usuario apreciar la evolución y la persistencia de ciertos símbolos a lo largo del tiempo, y cómo estos continúan influyendo en la identidad de las marcas actuales.
Más que una simple representación visual, es el reflejo tangible del intenso trabajo realizado por nuestro equipo durante las últimas dos semanas. Cada conexión, cada imagen y cada texto han sido cuidadosamente seleccionados y dispuestos con un propósito claro: ofrecer una experiencia enriquecedora y esclarecedora a los visitantes. Cada elemento del mapa cuenta una historia, revela una decisión creativa, o desvela una conexión inesperada.