LAS SUPERSTICIONES Y EL MARTES 13

YAIZA MAYO MIÑAMBRES, 4ºESOA

Una superstición es una creencia contraria a la razón, que no tiene una explicación científica y que se relaciona con la mala o buena suerte. El origen de esta palabra procede del término latino superstitio, que en la antigüedad se empleaba para referirse a todo aquello que estaba por encima de lo establecido, que permanecía o sobrevivía.

En el mundo existen muchas supersticiones, como por ejemplo decir “Jesús” tras estornudar, cruzar los dedos para desear algo, apagar las velas en el cumpleaños de un solo soplido, barrer los pies, echarse sal en el hombro, ver un gato negro, encontrar un trébol de cuatro hojas o abrir un paraguas en un sitio cerrado. Pero ¿por qué somos supersticiosos? Los humanos siempre hemos intentado buscar una explicación lógica a todo lo que nos rodea. Sin embargo, ante la falta de evidencias científicas que justifiquen cómo y por qué pasan algunas cosas, intentamos encontrar las respuestas a modo de superstición.

Entre las más conocidas, además de las ya mencionadas, encontramos las siguientes:

Que el novio no pueda ver a la novia antes de llegar al altar y la mala suerte para la pareja: Esta creencia se remonta a los años en los que eran habituales los matrimonios concertados, en los que los padres pactaban el enlace entre sus hijos sin que hubiera amor entre los miembros de la pareja. Normalmente, los novios no se conocían hasta la ceremonia, ya que, si se veían antes, aumentaban las posibilidades de que alguno de los dos decidiera cancelar la boda.

Pasar por debajo de una escalera: Existen varias teorías, pero una de las más extendidas es la que considera que pasar por debajo de una escalera es un desafío a la Santa Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo), representada con forma de triángulo, como el que forma una escalera abierta o en contacto con la pared. De este modo, atravesarla se consideraba una falta de respeto y podía atraer la mala suerte.

Tocar madera para atraer la buena suerte: Su significado original simbolizaba tocar la cruz de Jesucristo como una forma de solicitar su protección.

Y ¿qué pasa con el martes 13? La popular frase “Ni te cases ni te embarques” surge de la fobia a los días que caen en esta fecha, en la que no es recomendable comenzar algún emprendimiento, trabajo o viaje, como tampoco ningún acontecimiento que vaya a acompañarte a lo largo de tu vida.

La asociación del martes 13 con la desgracia proviene del dios que da nombre a este día: Marte, dios de la guerra; y de la tradición religiosa, pues trece eran los asistentes a La Última Cena, siendo Judas el número trece, fue en el capítulo 13 del Apocalipsis donde llegó el anticristo, y, en las corrientes judías, se dice que eran trece los espíritus malignos. A todo esto, hay que unir algunas desgracias históricas ocurridas casualmente en esta fecha, como la caída del Imperio Romano en Constantinopla.

Como resultado de esto, algunas personas han originado un miedo irracional al martes 13 que se conoce como trezidavomartiofobia. Quienes lo sufren se sienten paralizados por el miedo a que algo malo les pueda pasar y no pueden realizar su vida normal durante ese día.

Este año el calendario tendrá un único martes 13 y será en junio.

Y tú, ¿crees en las supersticiones?