Mucha gente habla de respeto.
Mucha gente piensa mucho en ello.
Mucha gente simplemente actúa y se va.
Mucha gente no entiende lo que sienten los demás y, a veces, vive de forma muy irrespetuosa al hablar de los demás de cierta manera.
A veces hay personas que no pueden pedir perdón.
A veces hay personas que te hieren y te causan dolor.
A veces alguien dice algo que te entristece.
A veces alguien hace algo que puede decepcionarte.
El respeto empieza con la paz y la atención amorosa.
El respeto empieza con una comunicación clara.
El respeto empieza con escuchar y darnos paz y espacio.
El respeto es la base del cambio.
El respeto empieza con poder pedir perdón.
El respeto empieza cuando alguien te dice que eres importante y que vale la pena luchar por ti.
El respeto es cuando alguien te abraza y te quiere.
El respeto es amistad verdadera y verdadero cariño mutuo.
El respeto es necesario ahora y no después. El respeto es asumir la responsabilidad de tus acciones y de lo que has dicho. El respeto es elegir cambiar queriendo mejorar.
El respeto nace de invitar a alguien a tu vida y hacerlo sentir bienvenido.
El respeto nace de apoyar con cariño a quienes te rodean y no imponerte.
El respeto es dejar que los demás terminen de hablar.
El respeto no es terminar las frases de alguien sin que te lo pidan.
El respeto empieza por dar el tiempo y el espacio necesarios para sentirte tranquilo y hacer que alguien se sienta bienvenido.
El respeto es el punto de partida y luego surge una relación de amistad y atención amorosa.