Ponentes

Lola Oriol, maestra del Colegio Público de Educación Especial Gloria Fuertes de Andorra. Llegó a este Centro, al que le gusta referirse como "El Colegio de la Luz" hace 24 años y allí pretende acabar su tarea como docente.

Desde hace 17 años compagina las tareas en el Equipo Directivo (10 años en la Jefatura de Estudios y desde hace siete cursos en la Dirección) con la tutoría de alumnado con discapacidad intelectual asociada a otros trastornos que cursa la Formación Profesional Especial.

En el Centro coordina, además, los programas educativos, el Erasmus + y la Formación en Centros de Trabajo del alumnado. Llegó al Colegio de sus sueños de tierras de Valdejalón (sus raíces se asientan en Morata de Jalón) y se enamoró de las sierras y las gentes de Teruel y, sobre todo, del Colegio de sus sueños, de su especial lugar en el mundo.

Vinculada además a plataformas y movimientos sociales a favor de la vida en el medio rural y en la lucha de mejorar los servicios públicos en todos los territorios.                                       

El Colegio de la Luz

En el Colegio "Gloria Fuertes" entendemos que la expresión plástica, en el marco de la Educación Artística, constituye una de las actividades más sugerentes y ricas para mostrar el potencial creador de los niños. El arte integra en una misma concepción el desarrollo de los sentidos y el crecimiento armonioso de las funciones mentales. Su práctica contribuye al desarrollo de las más variadas capacidades y a la adquisición de hábitos de trabajo, destrezas, sensibilidad estética, libertad en la interpretación de la realidad, comprensión y adaptación al medio. Proporciona grandes satisfacciones al expresar los propios sentimientos y emociones, aprendiendo a compartir ideas, materiales, proyectos y a valorar el trabajo de los otros. 

En la vida de nuestra escuela la actividad artística juega una parte importante de la actividad cotidiana. Enseñamos a los niños a familiarizarse con la belleza en todas las cosas, tratando de convertir en hermoso el ambiente que les rodea con sus propias obras.

Para todos en general, pero sobre todo para nuestro alumnado con necesidades educativas especiales, las actividades artísticas tienen un importante papel que desempeñar, al ser portadoras de un potencial de valores educativos tan amplio que pueden considerarse un medio ideal para la educación integral. Además, la práctica de actividades artísticas es un medio de comunicación no verbal y alternativo para quienes tienen dificultad para expresar sus ideas y emociones.

A lo largo de la exposición, recorreremos algunos proyectos que han servido para potenciar una actividad significativa, artística, social y funcional. Actividades artísticas colectivas cuyos resultados sirven de disfrute y funcionalidad y, al mismo tiempo, complementen el valor estético de los lugares comunes. Proyectos que nos sirven, además, para conocer, valorar y respetar las principales manifestaciones artísticas, así como los elementos más destacados del patrimonio cultural.

Noemí Calvo vive en Alfocea, barrio rural de Zaragoza, desde 2007. De madre peluquera y padre calvo, dice que la guasa con su nombre viene de lejos, de ahí que se haga llamar Noemí Calvo con pelo.

Se define a sí misma como fabricante de ideas. Pinta murales, diseña logos y carteles, hace collages, transforma patios de colegios, inventa juguetes y, cuando saca un rato, llena de coloridas pegatinas los lugares más insospechados de su pueblo. Trabaja con cualquier material que se le ponga por delante: papeles, piedras, madera, hojas, espaguetis, incluso peladuras de naranja. Cambian los materiales, pero nunca la herramienta: siempre lleva encima unas tijeras. Recicla, reutiliza y rejuega. La naturaleza y los procesos lentos le apasionan, así como los juegos de palabras, la imaginación, el juego y la creatividad. Considera estas herramientas sus vecinas, a las que siempre pide sal si se le acaba.

Estudió Escultura y Bellas Artes y se ha formado en Escultura aplicada al espectáculo. Como autónoma, hace malabares entre ser madre, ir a clase y su trabajo impartiendo talleres creativos con distintas temáticas. También lleva a cabo proyectos y construcciones de espacios de juego en entornos escolares.

Es la autora del mural "el primer amor debería ser el amor propio", un trabajo que realizó en 2021 en Andorra (Teruel), dentro de la conmemoración del 8 de Marzo, día internacional de la Mujer, y cuya vandalización fue respondida a lo largo y ancho del territorio. También diseñó junto a la artista Ana Mota, el cartel del 8M para el Ayuntamiento de Utebo. Y, ese mismo año, presentó la exposición Palos, pelos y piedras, en el Armadillo Ilustrado, en Zaragoza. 

Ha ilustrado el cuento Dhor el compostador, de Judit Villén y Raquel Egea (Nómadas - Educación y gestión ambiental), y Cuidadín y Gastón, un libro sobre consumo responsable publicado por ECODES (Fundación Ecología y Desarrollo) y la Asociación Hermanamiento León (Nicaragua) de Zaragoza. 

Además, colabora con la PAI (Promotora de Acción Infantil) y ha impartido talleres para bebés en el Espacio Bebé de Zaragoza.

Crear a piezar de todo

Taller con claras intenciones de jugar y crear a pesar de todo, incitando desde el error en un primer vistazo.

Como ingredientes principales tenemos palabras, piezas sueltas, tesoros de la naturaleza, texturas, vinilo, objetos reciclados, madera y color. Jugaremos a ver de diferentes maneras, dinámica polimórfica.

Partir desde un objeto natural, reciclado o funcional, para componer una imagen según las preferencias de cada persona, a través de un proceso guiado, pero donde prevalece la creación libre.

¿Cómo puede ser que un palo pueda ser tantas cosas a la vez? Sobre la mesa hablaremos de creatividad, composición, error, azar, casualidad e imaginación.

Del valor de lo efímero y de perdernos para encontrar nuevos caminos.