El primer día además de las presentaciones pertinentes por parte de la agencia de Riga, nos dividieron en varios grupos y nos hicieron entrega de unos documentos. En realidad, estos documentos explicaban un juego de roles. Cada persona era un país (a mí me tocó ser Alemania) y teníamos que llegar a unos acuerdos para comprometernos a reducir la huella de carbono sin perjudicar la economía del país al que representábamos. Esto dio lugar a una teoría en la que se explicaba los papeles/posiciones que hay en toda negociación y lo importante que es colaborar y cooperar para poder alcanzar los objetivos.

El segundo día se llevaron a cabo durante la mañana varias conferencias sobre el impacto que tiene la sociedad y nuestras acciones diarias en el ecosistema y el medio ambiente. Por la tarde, nos dividimos de nuevo en grupos, mi grupo fue el taller de bioeconomía. Además de entender en qué consiste esto exactamente, se nos dio la oportunidad tras leer un trabajo de investigación de pensar en un producto derivado de la madera que encajara con ese concepto de bioeconomía. Después de este taller, hicimos una ruta guiada por la ciudad de Riga y más tarde fuimos a cenar a un restaurante con vistas a la Ópera.

El último día, tuvimos la suerte de poder asistir a una eco-escuela y descubrir todos los proyectos e iniciativas que había implantado el centro. Fue una experiencia muy enriquecedora.

Nuestro Job shadowing ha tenido lugar en el 5th Gymnasium of Volos (Grecia) entre los días 15 – 19 de abril de 2024, coincidiendo con una movilidad con alumnos que tenía programada el instituto que nos acogía, dentro de otro proyecto Erasmus+ llamado Urban Monsters, que incorporaba alumnos de Italia, Alemania, España, Finlandia, Portugal y Eslovaquia. Se trata de un Junior School con 250 alumnos de entre 12 – 15 años y 25 profesores.

El primer día nos recibieron a todos en el centro, con una ceremonia de apertura que comenzaba con alumnos griegos realizando bailes tradicionales y en la que posteriormente todos los centros tuvimos la oportunidad de presentarnos ante el resto de asistentes. Después continuamos con una actividad relacionada con los Argonautas, debido a su importancia histórica en la zona; para concluir con una actividad relacionada con la concienciación medioambiental, centrada en la reutilización de ropa para elaborar balones.

El resto de días los destinamos a alternar visitas culturales (junto a los grupos de movilidad de alumnos) y conocer el funcionamiento y organización del centro. Entre las visitas culturales destacamos la subida al Monte Pelion, donde se ubica el pequeño y típico pueblo de Makrinitsa, y la visita a Meteora, Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. En cuanto al funcionamiento del centro, pudimos visitar las instalaciones y observar clases de Inglés, Física y Química, Sociología y nutrición, entre otras; nos entrevistamos con el equipo directivo, la pedagoga terapéutica y la responsable de la mediación escolar. Lo que destacamos tras este periodo de observación es:

• El edificio. El instituto no se parece a lo que estamos acostumbrados en España, de hecho se asemeja a un bloque de pisos con forma de L, quedando en el centro el recreo/pista deportiva.

• Horario diferente al español: Tienen 7 sesiones de 45 minutos, con un descanso de entre 10 y 5 minutos entre clases, en el que los alumnos salen al patio, comen, van al baño, etc. Más un recreo de 15 minutos, al que ellos llaman descanso largo.

• Carga horaria de los docentes. El número de horas lectivas de los profesores depende de su antigüedad en el cuerpo, pudiendo ser de 23,

20 (a partir de los 10 años) o 18 (a partir de los 20 años) horas a la semana. No existe el concepto de horas complementarias de guardia,

cuando un profesor no asiste al centro, se adelantan las horas de otras asignaturas, para finalizar las clases antes.

• Ratio de alumnos por clase. La ratio oficial para estos niveles es de 27 alumnos máximo por clase, no obstante en el centro los grupos estaban entre 20-23 alumnos.

• Aulas. Las aulas son similares a las nuestras (cuentan con pizarra blanca y pantalla digital – aunque no todas, en su caso, tienen proyector-.), pero los alumnos suelen sentarse de manera individual y las mesas son más estrechas y alargadas. Además de los libros digitales que los profesores manejan en las pantallas, los alumnos usan en las clases libros físicos, que son gratuitos durante todo el período de escolarización.

• Orientador. No hay un orientador por centro, sino que es itinerante entre varios institutos, visitando cada centro 1 día a la semana; lo que hace que su función real sea meramente testimonial.

• Programa de inmersión lingüística. Los alumnos que desconocen el idioma (migrantes y refugiados) tiene 3 horas cada día exclusivamente para aprender griego, en una clase separada del resto y con una pedagoga terapéutica. El material de estas clases se basa en libros que suministra el gobierno griego, divididos en varios niveles, para facilitar el avance individual de los estudiantes en el aprendizaje del idioma. Después de estas 3 horas, normalmente vuelven a las clases ordinarias con el resto de alumnos, para facilitar las relaciones sociales entre ellos.

• Mediación Escolar. No es un centro con graves problemas de convivencia, de hecho las aulas no se cierran con llave en ningún momento y los alumnos dejan todas sus cosas dentro, sin que se produzcan robos. Los alumnos mayores del centro, enseñan a los pequeños las normas y valores que rigen la convivencia del instituto. Los incidentes más destacables se producen en relación a los móviles, cuyo uso está prohibido en el centro, sobre todo la realización de fotografías y grabaciones. La sanción para estos hechos es la expulsión del centro

durante 1 semana, e incluso el cambio del alumno a otro instituto en casos graves. No obstante, nosotras hemos visto que, igual que ocurre

en nuestro centro, los alumnos sí llevan el móvil a clase y lo usan a escondidas de los profesores.

Tras la ceremonia de clausura que tuvo lugar el viernes, donde nos despedimos de alumnos y profesores de las diferentes nacionalidades, hemos vuelto a España con la sensación de haber aprendido mucho, no solo sobre la cultura y educación griegas, sino también de todos los países asistentes, y con nuevos contactos para futuras movilidades de alumnos y profesores.

¡ AGRADECIDAS DE ESTA EXPERIENCIA !