Aprendizaje significativo

Origen y objeto de estudio

El origen de la teoría del aprendizaje significativo se enmarca en la psicología educativa. Ausubel buscaba conocer y explicar las condiciones y propiedades del aprendizaje que permiten provocar de manera deliberada cambios cognitivos estables y dotados de significado individual y social en el contexto escolar. El objeto de estudio de esta teoría es destacar los principios que gobiernan la naturaleza y las condiciones propias del aprendizaje que ocurre en el aula. Específicamente, se ocupa de:

·        Los procesos del individuo para generar y construir su conocimiento.

·        La naturaleza de ese aprendizaje, es decir, cómo se produce realmente.

·        Las condiciones para que el aprendizaje significativo exista efectivamente.

·        Los resultados de este tipo de aprendizaje y cómo evaluarlos.

Conceptos clave

El aprendizaje significativo es el proceso por el cual una nueva información se relaciona de manera no arbitraria y sustantiva con los conceptos relevantes que ya existen en la estructura cognitiva del aprendiz. Estos conceptos previos reciben el nombre de "subsumidores" o ideas de anclaje y al producirse esa interacción con lo nuevo, se ven enriquecidos y modificados, tornándose más elaborados, estables y diferenciados. Para que ocurra el aprendizaje significativo deben darse dos condiciones fundamentales: a) Predisposición por parte del aprendiz para aprender de esa manera y b) Que el material a aprender sea potencialmente significativo, es decir, que pueda relacionarse intencionalmente con su estructura de conocimientos.

Para facilitar la organización de la enseñanza hacia la consecución de aprendizajes significativos, Ausubel propuso cuatro principios: 1) Diferenciación progresiva: ir de lo más general a lo más específico; 2) Reconciliación integradora: explotar las relaciones entre ideas y reorganizar la estructura cognitiva; 3) Organización secuencial: Respetar las relaciones de dependencia natural del contenido; y 4) Consolidación: insistir en el repaso de ideas relacionadas para su afianzamiento. Por otra parte, Ausubel no considera al estudiante como un receptor pasivo. Más bien tiene un papel activo al identificar semejanzas y diferencias y reorganizar su estructura de conocimientos. Ausubel enfatiza la eficiencia del aprendizaje por recepción en contextos educativos, siempre y cuando se promueva la reflexión y la conexión con el conocimiento previo.

Aportaciones y perspectivas

La teoría del aprendizaje significativo es constructivista ya que concibe al aprendiz como un ser que construye activamente su propio conocimiento al interactuar los nuevos contenidos con sus estructuras previas. Además, el concepto de aprendizaje significativo puede considerarse una idea suprateórica compatible con distintos enfoques constructivistas, Por ejemplo: Piaget y la asimilación, acomodación y equilibrio se relacionan con el concepto; Kelly y sus "constructos personales" son análogos a los subsumidores; Vygotsky y la internalización vista como pasar de significados lógicos a psicológicos.

Desde la psicología cognitiva, algunas teorías han contribuido a explicar y fortalecer los fundamentos de la teoría del aprendizaje significativo al aportar constructos y mecanismos que permiten comprender mejor el proceso de construcción de este tipo de aprendizaje. Por ejemplo, los modelos mentales de Jonhson-Laird permiten representar, ante la imposibilidad de aprehender el mundo directamente, modelos mentales) que actúan como intermediarias entre el individuo y su entorno. El razonamiento se lleva a cabo mediante la combinación de estas representaciones cognitivas análogas que representan los objetos y situaciones captando sus atributos característicos. Otra perspectiva es la de Vergnaud, a través de cómo los conceptos se construyen y operan en el conocimiento humano en estrecha relación con las situaciones a las que se enfrenta el sujeto. Estos esquemas conceptuales que forman parte de los campos conceptuales permiten la asimilación y acomodación de las estructuras cognitivas al concebirlos como las conceptualizaciones implícitas que soportan al individuo en su adaptación.

Conclusión

A más 60 años de su formulación inicial, la teoría del aprendizaje significativo sigue siendo un referente teórico ampliamente reconocido en el ámbito de la psicología educativa por su gran poder explicativo y predictivo. Sus planteamientos han permitido derivar valiosas aplicaciones prácticas para guiar de manera efectiva la enseñanza hacia el logro de aprendizajes duraderos y con sentido. Si bien la teoría de Ausubel ha sido ampliamente estudiada y aplicada, aún se mantiene abierta la posibilidad de seguir profundizando y realizando revisiones críticas que permitan afinarla y actualizarla a la luz de los continuos avances en la investigación sobre los procesos cognitivos y la enseñanza-aprendizaje.

Referencias bibliográficas

Palmero, M.  (2004). La teoría del aprendizaje significativo. In Proceedings of the First International Conference on Concept Mapping (Vol. 1, pp. 535-544).

Palmero, M. (2011). La teoría del aprendizaje significativo: una revisión aplicable a la escuela actual. IN. Investigació i Innovació Educativa i Socioeducativa, 3(1), 29-50.

Elaborado por: Edrei Robles