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Según el análisis de Economentes, grupo perteneciente a la Universidad Nacional Autónoma de México, se determinó que gracias a la gestión que ha venido realizando el presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador, la confianza del pueblo en el oriundo de Tabasco continúa creciendo desde que inició su sexenio.
Zavaleta explica:
El comportamiento del consumo en los sexenios. El consumo de las familias y de las empresas aumentó considerablemente en dos sexenios; con Calderón y con AMLO. Durante su primer trimestre de gobierno de Andrés Manuel el consumo privado ha aumentado en comparación con el de Peña Nieto.
Un ejemplo es con Peña Nieto, en donde se observa que el consumo estuvo sólo un poco por encima que en el gobierno de Calderón.
El análisis, se basó en Economentes, y el título de la investigación es “AMLO vs los expresidentes: consumo y confianza”.
En dicha investigación se asegura que el aumento del consumo se debe a la confianza que tienen los mexicanos en AMLO.
Asimismo se puede leer en la investigación que el consumo privado: “es un indicador de confianza de la economía sobre la confianza de la población en su gobernante”.
De esta manera, desarrolla y explica que el consumo de las empresas y de las familia en su mayoría se ve afectado por los políticos.
Por lo que cuando hay un nuevo presidente en el poder la economía tiende a desestabilizarse momentáneamente, no funciona como lo hace normalmente.
Las familias pueden estar asustadas o confiadas porque gano/perdió el candidato de su preferencia, y lo mismo ocurre con las empresas.
Es por esto, que Jorge Zavaleta, quien es el investigador puntualizó:
“Es por ello por lo que conocer el nivel de consumo en la economía durante el primer año de mandato presidencial permite conocer la confianza que la economía mexicana le tiene a su nuevo gobernante”.
Las familias pueden estar asustadas o confiadas porque gano/perdió el candidato de su preferencia, lo mismo ocurre con las empresas. Es por ello por lo que conocer el nivel de consumo en la economía durante el primer año de mandato presidencial permite conocer la confianza que la economía mexicana le tiene a su nuevo gobernante.
Lo anterior tal como lo puntualiza Jorge Zavaleta, autor del artículo.
Esta información tiene como complemento un análisis del grupo Economentes, de la UNAM, en el sentido de que el consumo privado en los primeros meses del gobierno de López Obrador ha sido mayor al de las últimas tres administraciones.
Edad, nacionalidad, si es delantero, son factores que influyen en el “precio de un jugador”, etcétera, sin embargo se observa una oleada de sobreprecios en el mercado del futbol, en el espacio de análisis de Economentes, de la UNAM, José Luis López.
Por su parte, Eufemia Basilio Morales, doctora en Economía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) afirma que, aunque las mujeres entran más al mercado laboral, parece que tienen un retroceso en el mercado financiero.
“Impacta de manera global porque al no tener accesos a activos o a la inclusión, finalmente es un retroceso, y si hablamos de la mujer, se abre la brecha de ingresos, de su empoderamiento, o deriva en que no pueda abrir su empresa, o acceder a créditos”, me explica la también investigadora del Instituto de Investigaciones Económica de la UNAM.
La doctora Eufemia también es directora general del sitio en línea Economentes, cuyo objetivo es difundir información económica actual con “un lenguaje claro y preciso para su entendimiento”.
Entrevista para la Revista Cambio del 31 de agosto del 2018. Por Estefania Camacho.
La periodista Fernanda Fragoso narra que el gasto programable, que son los recursos que se destinan a los ramos administrativos, autónomos y generales, se destinaron 1.9 billones de pesos, lo que implicó un incremento de 2.5%, respecto del año anterior.
Lo peor de todo, como el cambio en la situación fiscal no provino ni de mayores ingresos ni de menor gasto, “estos ingresos extraordinarios se gastaron de manera ineficiente y las variables macroeconómicas no cambiaron en nada”, subrayó el economista Mateo Mendoza.
Mateo Mendoza indicó al respecto que “del 2012 al 2016, el gasto público aumentó casi en 20% en términos reales y en cada año se gastaba más de lo que se ingresaba, es decir, tuvo déficit todos los años.