Una CDMX mas igualitaria, según la nueva constitución de la ciudad

El próximo lunes 17 de septiembre entra en vigor la nueva constitución política de la Ciudad de México, misma que, después de superar los análisis hechos por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), se perfila a ser una de las constituciones “más progresistas en materia de derechos humanos” en palabras de Miguel Ángel Mancera.

Esta constitución logra grandes cambios en materia de derechos humanos, administración pública y participación ciudadana, tales como la incorporación de un sistema local anti corrupción encabezado por un consejo ciudadano, elimina el fuero y otro tipo de privilegios de los servidores públicos y valida y reconoce los plenos derechos humanos para cualquier estructura familiar. Además, se establece un sistema presupuestario basado en los resultados a la par que se incorpora límites de afinación de presupuesto para el Congreso local.

En otro apartado, se contemplan lineamientos para el uso de tecnologías digitales, así como de desarrollo humano. Se pueden destacar en este sentido la formación de límites de edificación para la protección de zonas ecológicas y rurales, además de garantizar el acceso a internet y tecnologías digitales dentro de la ciudad de una forma paulatina.

En materia de justicia, la constitución da paso a la creación de una defensoría pública para la asistencia profesional de abogados públicos que prestarán servicios gratuitos a la ciudadanía e independiza al Consejo de la Judicatura del Tribunal Superior de Justicia.

En cuanto a las asignaciones a nivel alcaldía, las instituciones ahora se encontrara mayormente descentralizadas, brindando a las autoridades regionales de la ciudad mayor autonomía en al distribución de la tributación, así como mayores responsabilidades con respecto a la impartición de servicios públicos.

Por último, algunos de los puntos más controversiales dentro de la constitución son la validación del uso medicinal de la marihuana dentro de la Ciudad, el derecho de la autodeterminación de la muerte digna y la defensa de los derechos sexuales de todos los pertenecientes a la ciudad.

En conclusión, la nueva constitución de la CDMX va dirigida hacia la diversidad y la descentralizacion, a la vez que fomenta una mayor participación ciudadana en los procesos públicos. Se tiene que resaltar la progresividad con la que fue elaborada, así como las intenciones de igualdad social y justicia que se perciben en sus artículos.