Disminuye en marzo la tasa de desocupación.

A pesar de la crisis por coronavirus la tasa de desocupación mexicana disminuye en marzo.

Fuente: Imagen tomada de TreceBits

Haziel Ángeles Juárez
06 de abril de 2020

Contra todo pronóstico y aún con la crisis económica impuesta mundialmente por el covid19, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) reporta que en el mes de marzo para México no se registra un aumento en su tasa de desocupación, entendida como el “Porcentaje de la Población Económicamente Activa (PEA) que no trabajó siquiera una hora durante la semana de referencia de la encuesta, pero manifestó su disposición para hacerlo e hizo alguna actividad por obtener empleo”, pues esta se encuentra en 3.3% de la Población Económicamente Activa a nivel nacional; una reducción de 0.4 porcentuales respecto al mes de febrero (3.7%). En comparación al mes de marzo del año anterior, de igual forma se registró una disminución negativa, pues en 2019 de dicho mes se registro una tasa de 3.6%.

Fuente: Elaborado por INEGI. INDICADORES DE OCUPACIÓN Y EMPLEO CIFRAS OPORTUNAS DURANTE MARZO DE 2020 (Cifras desestacionalizadas)

Por otra parte, la tasa de subocupación (referida al porcentaje de la población ocupada que tiene la necesidad y disponibilidad de ofertar más tiempo de trabajo de lo que su ocupación actual le demanda) representó el 9.3 por ciento. En su comparación anual, esta tasa fue mayor a la de igual mes de un año antes que se ubicó en 7.1 por ciento.

En contraste con todo lo anterior, semanas atrás se había reportado la lamentable noticia de que durante marzo se habían perdido 346,878 puestos de empleo, una cifra triste en tanto que durante 2019 se habían creado 342,077 empleos formales, es decir, en un solo mes se perdieron todos los trabajos impulsados a largo de un año, siendo Quintana Roo, la Ciudad de México y Nuevo León las entidades en donde se concentran la mayoría de los despidos.

No obstante, aunque recientemente INEGI reporte que la tasa de desocupación no significa que la economía va viento en popa, sobre todo en un entorno y contexto adverso al que apenas se está adentrando el conjunto económico.

Las recientes semanas el debate político-económico ha girado en torno a las medidas obradoristas para enfrentar la crisis, en donde más de una vez se ha patentado la disonancia teórica e ideológica entre el presidente Andrés Manuel y sus hacedores de política económica. La resolución de aquella medición de fuerzas —contradictorias, pues no deberían ser disidentes entre sí— marcará el porvenir del futuro de grandes masas proletarias mexicanas.