Las implicaciones del cierre de gobierno en Estados Unidos

Estados Unidos inició el sábado 20 de enero un cierre parcial de sus actividades de gobierno originado por la falta de fondos para financiarlas luego de que republicanos y demócratas no llegaran a un acuerdo en el Congreso. Al día de hoy, 22 de enero, el senado de Estados Unidos aprueba terminar con el cierre de Gobierno después de casi tres días.

Eufemia Basilio
22 de enero de 2018

La última vez que el Gobierno de Estados Unidos tuvo que cerrar por falta de fondos fue bajo el mandato de Barack Obama en octubre de 2013, en esa ocasión el cierre duró 16 días.

Un cierre ocurre cuando el Congreso de los Estados Unidos no aprueba los fondos suficientes para las operaciones y agencias del gobierno. Ante esta situación la mayoría de los servicios del gobierno se congelan, salvo aquellos que se consideran esenciales, como el Departamento de Seguridad Nacional y el FBI. Las agencias que se consideran no esenciales, incluyendo las que pagan préstamos a pequeñas empresas y procesan solicitudes de pasaportes, dejan de trabajar mientras el Congreso llega a un acuerdo sobre un proyecto de ley para el presupuesto federal. Durante un cierre, casi el 40 por ciento de la fuerza de trabajo gubernamental es suspendida sin goce de sueldo.

En esta ocasión, de frente al primer año de gobierno de Donald Trump sucede de nueva cuenta un cierre parcial, en el primer minuto de este sábado 19 de enero se pararon actividades, el origen de este paro deriva de que en el Congreso el Partido Republicano necesitaba de 60 de 100 votos para aprobar una extensión por un mes en el presupuesto aprobado del año pasado, con el fin de permitir negociaciones para un plan anual definitivo, pero no logró obtenerlos.

La discusión de los miembros del Congreso giraba en torno sobre lo que debería incluirse en un proyecto de ley de egresos para mantener abierto el gobierno. Los demócratas han hecho hincapié en que cualquier compromiso también debe incluir protecciones para más de 700 mil jóvenes inmigrantes indocumentados, conocidos como “dreamers”, que fueron ingresaron a Estados Unidos siendo niños.

A los llamados “dreamers”, se les otorgó el estatus legal temporal bajo el gobierno de Barack Obama, y están ante la inminente amenaza de deportación cuando Donald Trump entró al poder y decidió revocar sus protecciones en septiembre pasado.

Los republicanos por su parte afirmaban que no pactarían un acuerdo para el DACA propuesto por Trump a menos que los demócratas cedieran algunas mejoras de la seguridad fronteriza, incluyendo fondos para el muro del presidente Donald Trump.

Aunque el cierre duró solamente tres días nadie sabía realmente cuánto duraría este cierre parcial, finalmente al día de hoy el Senado de Estados Unidos logró este lunes 22 de enero los más de 60 votos que necesitaba para aprobar la extensión presupuestaria y terminar así con el cierre del Gobierno; el voto final fue de 81 contra 18. Aunque el acuerdo es solo por las próximas tres semanas.

El Gobierno estuvo cerrado por casi tres días después de que los republicanos y demócratas no lograran aprobar un proyecto de ley que permitía la financiación de las operaciones del gobierno este viernes.

Hay que tener en cuenta que de haberse prolongado este cierre casi 1 millón de personas no recibirían sus cheques de pago. Lo que le costaría a Estados Unidos aproximadamente 6 mil 500 millones de dólares por semana, según un informe de los analistas de S & P Global publicado en diciembre.