¿Qué está sucediendo con el mercado de valores?

Durante el mes de septiembre de este año, el comportamiento de la bolsa de valores estadounidense no fue para nada alentador. A pesar de que es habitual que exista volatilidad en los mercados, sorprende incluso a los expertos el hecho de que la tendencia negativa se haya agudizado durante los últimos días, aun cuando los principales índices accionarios en Estados Unidos concluyeron la sesión del día de ayer en terreno positivo.

Recientemente, el Fondo Monetario Internacional dio a conocer sus estimaciones sobre el crecimiento económico mundial. Las alarmas se encendieron cuando el FMI se mostró pesimista al respecto, debido principalmente a la guerra comercial que se ha desatado entre Estados Unidos y China. Esto ha generado perturbaciones en el comportamiento de los mercados bursátiles alrededor del mundo, dada la integración y complejidad del sistema financiero.

Otro de los motivos por los cuales el mercado se ha tornado turbio recientemente, es la expectativa que se tiene ante un posible aumento de los tipos de interés en Estados Unidos; esto obedece a la notable mejoría de la economía estadounidense, tal como señaló Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal.

Analistas consideran que las tasas de interés “están siendo exageradas” de tal modo que la economía podría entrar en un estancamiento. El impacto de estas decisiones ha sido tal que el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, se ha pronunciado en contra de ello, argumentando incluso que la FED “se ha vuelto loca”. Además, considera que los tipos de interés altos generan que el ambiente en la guerra comercial antes mencionada sea más tenso y la situación se torne en su contra, pues sus exportaciones disminuirían considerablemente al tener un tipo de cambio apreciado respecto al resto de las monedas.

¿Cómo impacta esta situación a México?

Generalmente, los mercados emergentes son quienes perciben primero -y de forma más aguda- los cambios en la política económica de las economías desarrolladas (en este caso, Estados Unidos), pues las subidas o bajadas abruptas de los tipos de interés tienen impactos directos en aspectos tales como el tipo de cambio y la inversión. De este modo, el Banco de México se ve de cierta forma subordinado a las medidas de política monetaria establecidas por la FED, tal como advirtiera Agustín Carstens en días anteriores.

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