¡Ahí viene AMLO!

Las declaraciones y las propuestas en materia económica realizadas por el presidente electo han generado volatilidad, sobre todo en el mercado financiero. El “efecto AMLO” podría agravarse o dar un giro total una vez que comience su gestión.

Eduardo Medina
01 de diciembre de 2018

Llegó el momento; el nuevo gobierno entra al poder este primero de diciembre, la incertidumbre sigue apoderándose de los mercados.

En los últimos meses, el próximo presidente de México y su equipo, han sido señalados y cuestionados dada la inconsistencia de sus propuestas. A un día de asumir la presidencia, la aceptación del presidente electo ha disminuido considerablemente. Ante esta situación, los inversionistas han castigado al país, pues los capitales han comenzado a buscar nuevos y más prósperos ambientes.

Según cifras de Expansión, la inversión extranjera directa ha llegado a caer hasta un 74.5% en el tercer trimestre del año, esto representa una diferencia de al menos 5 mil millones de dólares en comparación con el año anterior.

Esto se puede explicar por la cancelación repentina del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, la caída en el valor de las acciones de los bancos debido a los inminentes ajustes en el valor de sus comisiones, entre otras cosas.

Lo anterior ha generado un efecto dominó que hasta el momento se ha traducido en una salida masiva de capitales; esto se puede apreciar con claridad en la caída abrupta que ha registrado la Bolsa Mexicana de Valores, de igual modo, en la caída del valor de los fondos de inversión y de incluso otros intermediarios financieros.

Podemos pensar que esta salida de capitales, la cual genera principalmente una depreciación de la moneda nacional frente al dólar, es momentánea, pues es un síntoma propio de un cambio de administración. Además, la llegada de un régimen de izquierda a un país como México puede traducirse en una posibilidad importante para lograr un cambio estructural que genere mejores condiciones para la inversión y el crecimiento económico.

Sin embargo, a pesar de que los especialistas indican que la volatilidad solo será momentánea, la tendencia ha permanecido a lo largo de semanas. La pausa en el flujo de inversión extranjera podría verse activa incluso por meses, una vez que el nuevo gobierno comience a mandar señales de estabilidad a los mercados. En caso de que no sea capaz de realizar esta labor, la situación podría tornarse cada vez más complicada, pues la incertidumbre juega un papel muy importante a la hora de tomar decisiones importantes en materia de inversión. Las declaraciones, y sobre todo las acciones del nuevo presidente en los próximos días serán clave para poder vislumbrar el futuro a corto-mediano plazo del país.