Lo que piensan los nietos del movimiento del 68, sobre la participación actual de los jóvenes en México.

El desencanto de los jóvenes ante la política y la democracia, a 51 años del 68

Autor de imagen: UNAM
Jorge Zavaleta
04 de octubre del 2019

Madero ganó las elecciones y tomó posesión el 6 de noviembre de 1911, sin embargo, una gran parte de su coalición se desintegro, principalmente por no realizar las acciones prometidas durante la campaña para destituir a Díaz en el poder. A causa de esto tuvo que enfrentarse a 4 revueltas que desestabilizaron su mandato, muriendo el 22 de febrero de 1913, a un año y dos meses de tomar posesión. El fantasma de Madero acompañó a todos los mandatarios hasta 1968. Este fantasma es la democracia. Misma que en un país como México llevará a una inestabilidad del poder político, los mandatarios evadían la posibilidad de democracia real, imponiendo el partido único.

En 1968, México venía de un gran crecimiento económico, pero las represiones hacia los movimientos estudiantiles desde 1958 hacían crecer el descontento social. Además, la fuente de crecimiento económico venía disminuyendo, la era de oro del capitalismo estaba entrando a su fin. Con los juegos olímpicos en puerta y el movimiento estudiantil en crecimiento, el presidente Diaz Ordaz ordeno realizar un operativo en Tlatelolco para frenarlo, situación que terminó en la matanza de Tlatelolco. Sin embargo, este movimiento buscaba defender los derechos constitucionales, las libertades democráticas, por lo que se le considera un movimiento democrático. El fantasma de Madero por fin empezaría a dejar de ser un lastre para la política mexicana.

Este cambio no sucedió sólo en México, el mundo también sufrió en el sistema político. Ejemplo de ello es la primavera de Praga ocurrida análogamente en 1968 en el que se buscaba descentralizar la autoridad administrativa y otorgar mayores derechos a los ciudadanos, esto dentro del bloque socialista, del otro lado del mundo geográfico y económico.

Estas acciones se conjugaron en las decisiones de la década de los años 70 en el mundo, que en México concluyeron con la crisis de la deuda. La política tiene efectos sobre la economía y viceversa, no se puede separar el poder político del económico. Después de 51 años ¿Qué es lo que tienen que decir los nietos del 68 sobre la democracia?

Fuente: Elaboración propia con datos de Observatorio de juventud para América Latina y el Caribe.

De acuerdo con la tabla la democracia muestra un desencanto por parte de los jóvenes mexicanos, su aprobación no ha sido mayoritaria en los años de muestra de la encuesta, este amargo sabor se fue incrementando llegando a que en 2015 tan sólo un cuarto de la población juvenil acepte que tiene satisfacción con la forma de gobernanza en el país. Para contrastar, entre la población adulta total en México la democracia es mejor recibida, su aprobación es por mayoría desde 1996 y ha ido aumentando desde el 2013.

El descontento no va dirigido a una parte en específico del sistema democrático; si observamos lo que piensan acerca de los tres poderes del Estado el que menos ha perdido aceptación es el ejecutivo (representado por los partidos políticos) porque ya era muy baja, menos de un quinto de la población juvenil mexicana los acepta. En 2015 la confianza en el poder legislativo (congreso) y en el poder judicial fue de tan sólo un cuarto de los jóvenes. El decrecimiento es notablemente mayor entre 2013 a 2015, y no es por menos con lo ocurrido en 2014 con la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa. Lo interesante es que la confianza en la policía ha ido aumentando, quizás no de gran manera, pero este incremento no se vio afectado tan fuerte por lo sucedido y recordado el pasado 27 de septiembre.

En cuanto al interés en la participación política por parte de los jóvenes es muy bajo, pero un sentimiento muy elevado de creencia en el que su voz será escuchada, estamos en un momento en el que hay muchos micrófonos y poco interés.

Como se mencionó más arriba, el campo de la política y de la economía están íntimamente ligados. Este desencanto juvenil con la democracia viene también de los efectos económicos que produjo la crisis de deuda de 1980, en el que el nuevo manejo de política de estabilidad económica en el país se introdujo a partir de suprimir los salarios, disminuyendo la demanda total de la economía, el problema fue que se quedó aun pasando la crisis. Los efectos se acentuaron con la crisis de 1994 junto con la crisis mundial en 2008; un país con una clase asalariada con un bajo poder adquisitivo comprimido a partir de políticas públicas que favorecen a las empresas con un bajo nivel de impuestos, en donde los más afectados son las personas sin experiencia que apenas se insertan en el mercado laboral no es de esperar que estas últimas estén interesadas en participar en un sistema político que no les ha beneficiado.