Durante más de 40 años fue pionero en intervenciones cardíacas complejas del niño recién nacido. Participó desde 1975 hasta el año 2010, junto a su equipo, en más de 18.000 cirugías de cardiopatías congénitas en el Hospital Calvo Mackenna y la Clinica Santa María.
Al mismo tiempo incursionó con éxito en la pintura y posteriormente en la escultura, y por último, en la escritura de numerosos ensayos.