Se trata de dispositivos que, gracias a la flexibilidad, son convertibles. Desplegados ofrecen la funcionalidad de una tablet en el rango de las 7-8 pulgadas, y se pliegan para transformarse en un smartphone de pantalla más pequeña.
Según una encuesta realizada por Business Insider, entre sus lectores, el 84% dijo estar interesado en acceder a este tipo de dispositivos y un 36% aseguró estar "muy" interesado en estos productos.
Por empezar está la novedad: llama la atención poder plegar un móvil a la mitad. Pero además del aspecto llamativo lo cierto es que es una forma de tener una pantalla de gran tamaño sin perder la comodidad. Porque los móviles se pliegan y se guardan en el bolsillo. Así, por ejemplo, el Royole que mide 7,8 pulgadas se dobla y su tamaño queda reducido a la mitad.
Los móviles plegables facilitan el multitasking. Por su diseño, es posible utilizar dos o más apps en simultáneo. Y si bien eso puede ser posible en algunos móviles tradicionales usando la pantalla dividida, en el caso de los plegables es más sencillo y cómodo porque se cuenta con un display más grande.
Uno de los puntos en contra de estos dispositivos es el precio. Son móviles que cuestan más caros que la media. El plus de la pantalla plegable se paga caro. El FlexiPai se ofrece a partir de los USD 1500 y el Galaxy Fold se comenzará a comercializar a partir de USD 1.980.
En todas las presentaciones, los diferentes fabricante remarcaron que los equipos cuentan con un sistema de bisagra y flexibilidad en los display que son Amoled que les permite asegurar que los celulares resisten, en algunos casos, hasta 200 mil pliegues. Pero lo cierto es que, como en toda tecnología nueva, para saber si esto es efectivamente así habrá que verlos en acción. Por ahora es algo muy incipiente y si bien resulta prometedor, en algunos consumidores todavía hay dudas. Es cuestión de tiempo.