Árboles y plantas

El Arboretum de Lugán ofrece una de las mayores colecciones botánicas de España, incluyendo especímenes de porte monumental y ejemplares difíciles de contemplar en otros lugares. Entre las muchas especies presentes en el arboretum cabe destacar el liquidámbar (Liquidambar styraciflua), un árbol perteneciente a una antigua estirpe que se difundía por Europa durante el Terciario, pero que se extinguió de nuestro continente por causa de las glaciaciones; la catalpa (Catalpa bignonioides y Catalpa ovata), de Norteamérica; el alcornoque del Amur (Phellodendron amurense); el llamado 'palo zorrillo' (Ptelea trifoliata), de México; la caoba china (Toona sinensis); el arce de papel (Acer griseum), con su decorativa corteza brillante de color rojo anaranjado; el exótico Quercus engleriana; la Maddenia hypoleuca; el árbol aralia (Kalopanax septemlobus); la virgilia o Cladrastris kentukea, el llamado árbol de hierro (Parrotia persica) y un sin fin de especies que harán las delicias de todas las personas amantes de la naturaleza.

Liquidambar styraciflua
Cladrastris kentukea
Ptelea trifoliata
Toona sinensis
Maddenia hypoleuca
Acer griseum
Quercus engleriana
Kalopanax septemlobus
Catalpa bignonioides 'Aurea'
Parrotia persica

Otros árboles ornamentales muy bien representados en el arboretum son los eucaliptos del hemisferio sur, con especies tales como el Eucalyptus stellulata, el Eucalyptus viminalis, el Eucalyptus cinerea o el Eucalyptus parvula.

Eucalyptus viminalis
Eucalyptus stellulata
Eucalyptus cinerea
Eucalyptus parvula

Entre las coníferas, el arboretum de Lugán nos ofrece especies tan raras como la Keteleeria davidiana, el enigmático pino Huon, de Tasmania (Lagarostrobos franklinii); el híbrido espontáneo Abies x masjoannis, hallado en la década de 1950 en Cataluña; la metasecoya (Metasequoia glyptostroboides), descubierta para la ciencia la década anterior en China; el falso ciprés de Nootka (Xanthocyparis nootkatensis); la picea de Serbia (Picea omorika); el abeto japonés momi (Abies firma); la tsuga del Pacífico (Tsuga heterophylla); el ciprés calvo (Taxodium distichum) o el alerce patagónico (Fitzroya cupressoides), entre otras muchas.

Fitzroya cupressoides
Keteleeria davidiana
Lagarostrobos franklinii
Abies x masjoannis
Xanthocyparis nootkatensis
Picea omorika
Abies firma
Tsuga heterophylla
Taxodium distichum

Además de todas las especies y variedades de árboles mencionadas, el arboretum ofrece también al visitante la oportunidad de contemplar plantas y arbustos de pequeño porte que raramente podrá obsevar en ninguna otra parte. Algunos ejemplos son el peculiar pino enano de montaña (Pherosphaera fitzgeraldii), del que quedan tan solo 455 ejemplares salvajes en las Montañas Azules, cerca de la ciudad de Sydney; el pino pigmeo (Lepidothamnus laxifolius), considerada la conífera más pequeña del mundo y que es muy difícil de ver en cultivo en nuestras latitudes. Otras fascinantes plantas que habitan el arboretum son el brezo blanco de montaña (Cassiope mertensiana); la Arcterica nana, procedente del Norte de Japón y de la península de Kamchatka, o los neozelandeses Rauolia australis, Melicytus crassifolius, que produce unas llamativas bayas blancas, Leucopogon fraseri y Myrsine nummularia. En realidad, no se trata más que de una pequeña muestra que intenta servir como acicate para estimular la curiosidad del lector.

Pherosphaera fitzgeraldii
Lepidothamnus laxifolius
Cassiope mertensiana ssp californica
Melicytus crassifolius
Arcterica nana
Leucopogon fraseri
Myrsine nummularia
Rauolia australis

Es más, a pesar de las limitaciones climáticas, el Arboretum de Lugán cuenta también con una abundante representación de plantas crasas, tales como el maguey (Agave filifera), el amole (Yucca rostrata), el mezcal (Agave parryi) o el tehuizote (Dasylirion serratifolium), entre las muchas que cabría mencionar aquí.

Agave filifera
Yucca rostrata
Agave parryi
Dasylirion serratifolium

Lo que hemos mostrado hasta aquí no es más que una pequeña selección de todos los árboles y plantas existentes en el Arboretum de Lugán. Con más de 1500 especies y variedades de vegetales prosperando en medio de un paisaje de arrebatadora belleza, es difícil resumir todo el universo de conocimiento y sensaciones que los visitantes podrán experimentar. Se trata de un rincón de privilegiado encanto que nos permite acercarnos de nuevo a la Madre Naturaleza.