LUIS FLOREZ BERRIO -
Nació en San Andrés de Cuerquia el 22 de septiembre de1.926.
Jamás tuvo un maestro, ya que solo estudió un año y medio de primaria, pues fue expulsado de la escuela de varones de Yarumal, después de arrojarle un frasco con tinta a su profesor por haberlo castigado demasiado tiempo con los brazos en alto sosteniendo sendos ladrillos.
A Medellín llegó de muy pequeño a trabajar en tejares, tiendas y cacharrerías.
Por su propia cuenta estudió algo de comercio, como también cultiva con gran acierto la grafología y la quirología. Además cuenta con carné de periodista, otorgado por el Ministerio de Educación. Maestro de poesía en algunas entidades culturales
Pintor orientado hacia el paisaje, bodegón y desnudo.
Fundador de varios periódicos y revistas. Director por varios años de la página literaria de “La Defensa”.
De un estilo místico, social, lírico y romántico, sin influencias poéticas , aunque gusta de la poesía de Federico García Lorca y Rafael de León. Quiere mucho a Ismael E. Arciniegas, José Eustasio Rivera, Jorge Robledo Ortiz y Carlos Castro Saavedra.
Es un enamorado de los poetas que escriben bien y no gusta de los que faltan a la belleza poética, los que carecen de preceptiva (preceptos, reglas, condiciones), musicalidad y desvertebran mucho cada poema propio y carecen de talento suficiente, como los que dicen llamarse “prometeos”, porque, además son vacíos, carentes de ritmo, de elegancia. En una frase “no son poetas”.
Su obra la han comentado políticos de la trayectoria de, entre otros, Silvio Villegas, Sonia Olaya Córdoba, Jesús Peláez Álvarez, poetas nacionales e internacionales y profesores
En año (finales de los 50’ o principios de los 60’) que no recuerda muy bien, le fue otorgado el “Premio Lobo de la Paz”.
Actualmente vive en Medellín, siendo su oficina, el banco que esté desocupado en la avenida Junín del centro de la ciudad, donde hace correcciones a poemas que le son traídos para tal fin y también hace poesía por encargo.
Es llamado “El Poeta de la Paz”
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Raúl Rivero , Poeta Cubano
Navegó en la sombra No es que esté muy viejo. Es que ha vivido mucho tiempo y ha escrito muchos versos. Después de sus primeros 83 años en Antioquia, el poeta Luis Flórez Berrío no piensa moverse de allí. Ni va a dejar de cantarle a la paz en Colombia.
Librero, profesor y periodista, el poeta está considerado un maestro del soneto y del romance. Comenzó a escribir a los 13 años, cuando se encontró con los clásicos españoles y casi se aprende de memoria un manual de preceptiva literaria.
Otro escritor antioqueño, Jorge Robledo Ortiz, dijo que la poesía de Flórez es "humana, rebelde, metafórica, realista, brillante, hecha con el corazón y con el alma". Sus contemporáneos no le hacen justicia "por egoístas y por ambiciosos", agregó.
Según el periodista Jorge Esteban Vélez, el poeta tiene escritos algo más de 2.000 poemas, pero la mayoría están inéditos en unas carpetas antiguas. Ha publicado los libros Mientras llega la hora, Al compás de la espera, Ecos y Testigo soy.
Hay un poema de Flórez que no se ha podido ocultar en su patria querida. Y estos son los primeros versos de esa pieza memorable: "La paz no tiene paz, nació cansada/ creció enfermiza y navegó en la sombra/ Dios que la quiso tanto no la nombra/ y en sus milagros la dejó olvidada".
Presento al poeta Luis Flórez Berrío, como un ejemplo universal de la poesía social.
Juan Roca Lemus (Rubayata) 1960
Las tesis políticas en la poesía atrofian la belleza de la misma. No hay derecho a fomentar por rabia ideológica, el desamor humano, porque ello implica, además, el abajamiento de la belleza quebrada. No se puede tallar con iracundia un vaso de plata, porque se mella el vaso y se mella el escoplo. Paradójicamente y por ejemplo, Pablo Neruda hizo su maravilloso CREPUSCULARIO con tintes de rosicler, o sea que creó hermosamente sus crepúsculos con los cromáticos materiales de las alboradas. He ahí su armonía. Todo ello con refinado equilibrio y con amor con el amor. Pero, dígase cuanto se quiera, lo cierto es que cuando abandonó el amor por el amor, se dio a la poética de tesis, escribió con ira, y la poesía se le fugó como un papel en ventolera.
De ahí que me emociona muchísimo contemplar cómo Luis Flórez Berrío, cuya poesía nace en clima de anhelos para el bienestar social, exhala la verdad filosófica suya con poemas de alto nivel, rítmicamente establecidos con equilibrio de nobleza y se aferra a la temática de la PAZ con singular afecto.
Yo lo señalo ante los respetabilísimos lectores, como verdadero poeta de la limpidez, de la pureza de la verdad internacional, en cuanto al bienestar social, porque la suya es una poesía transparente, de amor por el amor. En la Paz Cansada, en La Paz Rebelde, en La Paz Profunda, en La Paz Metafísica y en La Paz de Dios, rutila la emoción de la bonhomía de un poeta que quiere a la vida humana con fervor cristiano, con espíritu luminoso, con un ardor anímico que Dios ha de premiarle porque anhela, por ejemplo, esta esperanza de realidad:
“Si la paz comandara entre la guerra,
Burlando el hambre y abreviando muertos,
Serían más honrados los desiertos
Y más dueños habría de la tierra”.
Señoras y señores: saludo en Luis Flórez Berrío al poeta sobre cuya testa aún juvenil, hay una lumbre inapagable: la lumbre del amor a la paz, del armoniosos concierto de todos los humanos. El también alza el arco iris con el simbolismo iris con el simbolismo irisado de su poesía. Bien merece que al lado de mi firma, otras más acrediten la Paz de Lucifer como texto de lectura regocijante en los centros educativos, culturales, cívicos, políticos y religiosos. Muchas Gracias.
Juan Roca Lemus (Rubayata)
1960
CONCEPTOS FRAGMENTADOS
NUESTRO POETA:
No decir, sino sugerir, es la tarea del poeta, es la virtud primera del poema. Ir más allá de las palabras, su recóndito sentido, tal vez más lejos, a donde ellas mismas no alcanzan a llegar. Luis Flórez talvez no sabe esto. Él quiere decir algo que siente, y buscar compañía a su dolor o a su alegría. Dar su alma a los demás. Él debe saber que la poesía es recuerdo de lo que se olvidó y volvió del olvido cualquier día, purificado por la muerte, y transfigurado en la canción.
La Defensa 1953
Hernando Rivera Jaramillo.
CONCEPTOS
“Bajos los Hongos” libro único, heterogéneo en su contenido, donde la poesía de su autor Sr. Luis Flórez Berrío, se eleva como en llamas de anhelos inconclusos, en busca de la resina del oxígeno que sostenga viva la luz del ideal. Las ilustraciones se acomodan al alma del poeta, formando un solo cuerpo artístico.
Se pasa revista a determinados valores, con lo cual se presta un servicio muy oportuno de información.
Bernardo Aristizábal Trujillo.
1955
Sus creaciones son de vivencias compartidas con quienes se ha visto convivir constantemente en la desolación y en un mundo sin años de soledad, cuando la soledad es de toda la existencia. Hace ver la incertidumbre pero plantea la esperanza, la superación espiritual, lo consciente de un pueblo.
Con Luis Flórez Berrío tendremos que decir entonces: -¡No importa que se tenga que sufrir el retiro aparente, el ostracismo odioso si con ellos se está construyendo el futuro de un país!
Dra. Sonia Olaya Córdoba
1955
Luis Flórez Berrío ama demasiado la lejanía, tiene un alma ávida de distancias. De teorías tenaces. Piensa en la continuidad, no en el fin. Su espíritu vuela por parajes de cruel incertidumbre y tiene la rebeldía de los decepcionados o glorificados. Tiempo nos quedará para analizar su obra, pero sí puedo decir: es un poeta.
Miguel A. Valencia
1955
La poesía de Flórez Berrío es un grito que saliendo de lo más profundo de su ser, contagia de desesperación a quienes la leen y hace sentir el miedo terrible de la existencia.
Mario Zabala Villegas
La fuerza creadora que se traduce en la obra de Luís Flórez Berrío, está matizada de eternidad y eternizada de ritmos y armonía.
Conrado Betancur
1955
Luis Flórez Berrío tiene talento. También creemos que tiene buena cultura. Y sobre todo su ambición es tan fuerte como la poesía que lleva en su sensibilidad descontenta. Él posee capacidad, orientaciones y sin duda, ansiedad incoercible para arrebatar el gajo del esquivo laurel. Ojalá alcance su victoria y marque su lira un triunfo categórico y definido. Flórez Berrío es un joven de talento poético. Hasta conversando con él se le advierte que está tocado del divino dolor de ser poeta.
Oriéntese él y procure reunir mayor número de experiencias, y no estará lejano el día en que pueda realizar un obra llena de mérito, de sentidos profundos.
Ernesto María González
Medellín, abril 28 de 1956