Reto 3

Reto 3: ...y Pedro Poveda eligió a Teresa(enlace al portafolio del Reto 3)

Antonio García, profesor de ética y religión

Definición del reto

Vuestro reto, como guardianes del tiempo, será investigar entre la relación entre Teresa de Jesús y Pedro Poveda.

Tiempo establecido para superar este reto

4 sesiones

¿Cuál es vuestra misión?

Misión cumplida... 

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Y PEDRO POVEDA ELIGIÓ A TERESA

Hoy día, los medios de comunicación social nos mete por los ojos a la gente en que debernos fijarnos, sobre todo a la hora de gastar el dinero. Nos presenta “sus modelos”. Los entendidos saben que todos nos fijamos en alguien: en nuestros amigos, en un maestro o maestra que tuvimos, en un futbolista, en una actriz de cine… y nos gustaría, de alguna manera, hacer las cosas como ellos porque son nuestros modelos.

Pedro Poveda también tenía modelos. En realidad sólo tenía uno, Jesucristo:

He aquí mi preocupación constante: que Cristo se forma en nosotros. Hasta que no pongamos todo nuestro empeño en estudiar, conocer, amar e imitar a Cristo, no adelantaremos”

Ningún cristiano debe tener otro modelo, Pero Poveda se puso bajo la protección de Teresa de Jesús porque sabía que Dios, que Jesús, se manifiesta en sus amigos, en sus “santos”, y ninguno le gustaba tanto como esta simpática monja que nació hace 500 años.

Pero ¿qué buscaba Pedro Poveda en Teresa de Jesús?

AMISTAD: Buscaba sólo eso que buscan los verdaderos amigos. Un verdadero amigo nos dice siempre la verdad. Nos quiere sin buscar el propio interés, es un amor gratis, no por lo que tenemos sino por lo que somos. Junto a un verdadero amigo nos sentimos más cerca de la verdad, más queridos y más libres. Santa Teresa tuvo una gracia extraordinaria para tener amigos. A lo largo de su vida escribió ¡nada menos que 15.000 cartas!

¿Por qué tuvo tantos amigos? Porque era muy humana y muy divina. Porque estaba muy cerca de Dios y muy cerca de todos los hombres. Es imposible ser amigo de Dios y no serlo de nuestros hermanos.

Santa Teresa tuvo las mismas dificultades que cualquiera de nosotros. Pasó hambre (a veces sólo tenía para comer una triste sardina) y no perdió la alegría. Recorría España entera aguantando el frío y el calor. A veces tuvo que andar varios kilómetros a pie o en malas caballerías hasta que murió en Alba de Tormes, muy enferma, a los sesenta y siete años, siempre andando. Toda sus vida con muchas preocupaciones y muchas enfermedades, pero dando ánimo a todos.

También Pedro Poveda supo ser verdadero amigo. “El amigo de las altas y difíciles empresas”, decían los que más le conocían. Algunos dijeron de él que era piadoso, sencillo, humilde, un gran amigo. Pedro Poveda sabía que la amistad es muy importante para tener verdadera humanidad y para estar cerca de Dios.

LA VERDAD: Santa Teresa le atraía a Pedro Poveda porque buscaba la verdad. Era una enamorada de la vedad, ella decía “de andar en la verdad”. La verdad es el camino que lleva a Jesús.

Las personas que son amigas de la verdad, que buscan la verdad, quieren conocer las cosas y vivirlas tal como son porque nada hay más hermoso para un hombre que ponerse cara a la verdad, cara a Dios, buscando ser honesto.

Ser honesto es muy difícil. Sólo las personas con un corazón humilde viven plenamente la honestidad. El ejemplo claro es María, la Madre de Jesús: “Proclama mi alma la grandeza del Señor porque ha mirado la humildad de su sierva”.

La persona humilde está convencida que de verdad no es nada, no es nadie. A Pedro Poveda le molestaba mucho que alguien le creyera importante. Decía un amigo suyo: “En las reuniones hablaba poco, casi siempre apoyaba el parecer de otro”. Poveda “andaba en verdad”, su humildad era de verdad, no fingida. Pero ¿qué hacía para reconocer a la verdad? Lo que dice Teresa de Jesús; rezar, hacer oración.

ORACIÓN: Santa Teresa descubrió que rezar es “tratar de amistad con quien sabemos nos ama”, con Dios. Rezar es hablar con Dios, con nuestro Amigo. Cuando rezamos hablamos con Dios como con un amigo y es Dios quien hace que le reconozcamos y pone en nuestro corazón las palabra que le decimos aunque no las digamos, aunque no estemos esperando qué quiere decirnos Él.

Decía Pedro Poveda: “Esto es lo más inconfundible de Santa Teresa, la oración. Las personas que rezan tienen un quid, algo especial por el que nadie puede confundirlas”. Las personas que hacen oración se parecen cada vez más a Dios.

MODELO: Los amigos de Dios nos enseñan a ir a Él, viven cerca de Él. Santa Teresa nos habla de las maravillas de Dios en sus libros, es una gran MAESTRA y modelo para los que tienen que enseñar. Por eso Pedro Poveda puso el nombre de Institución Teresiana a la asociación que él fundó, formada por hombres y mujeres que trabajan en la educación y en la cultura y desde allí quieren andar en verdad, quieren buscar a Jesús, la Verdad. Y la eligió como protectora especial porque con todo lo que sabía era sencilla, cordial, alegre, cercana.

¿Por qué creemos que han de ser siempre las personas cultas amigas de darse importancia? Santa Teresa fue muy santa y muy culta, pero poseía la sencillez más grande y la llaneza más franca y absoluta”