publicado, abril 20, 2024
EL CARIÑO SE AGRADECE
Pedro Luis Ferrer Montes
Quiero agradecer a Juan Carlos Cremata sus palabras de elogio hacia mi persona; no porque considere que objetivamente me retratan, sino porque entrañan una actitud de cariño que acojo con gratitud.
«Honrar, honra» —sentenciaba Martí. El elogio —que nada tiene que ver con la adulonería— siempre es un colirio para el alma colectiva, en un mundo donde tiende a proliferar el comentario impío y demoledor. Sépase que, mucho más que el encomiado, quien pondera resplandece por su alejamiento y negación del egoísmo avaro, que solo vierte palabras para exaltarse a sí mismo; y que, con tal de sobresalir, socava cualquier atisbo del prójimo.
Muchas gracias, Cremata: ojalá mi vida pueda parecerse en algo a la visión cariñosa que ofreces de mí.
Un abrazo fraterno.
Florida, abril 1, 2024.