Señor, ayúdame a entender,

porque el mundo tiene un criterio,

pero tu lógica es diferente

En el famoso incendio de Valencia del 22 de octubre fallecieron 10 personas. Fue un terrible accidente que ocupó periódicos y telediarios durante días.

En el año 2023, intentando llegar a Canarias, han muerto un total de 6.007 personas en pateras o cayucos, una media de 16 cada día.

Salvo en casos excepcionales, una llegada de una patera nunca abre un telediario o es portada de periódico. Simplemente, no es una noticia que nos sorprenda.

No se trata de que comparemos, porque todas las vidas humanas son igual de dignas. Desde el cristianismo consideramos a Dios como Padre/Madre de todos y todas. Se trata de caer en la cuenta de que el criterio del mundo no siempre es objetivo o justo, porque no trata a las personas por igual.

¿Hasta qué punto me importa más el criterio del mundo al criterio de Dios?

Al final de nuestra vida,

todos recibiremos nuestra recompensa.

Puede que aquellas personas aclamadas por el mundo se queden atrás,

mientras que las despreciadas por el mundo,

resulten ser las primeras.

Todo esto, Dios, lo ponemos en tus manos