Nuestros amigos, nuestra familia, en definitiva, las personas que nos quieren de verdad, nos ayudan a ser nosotros  mismos y conocernos un poco mejor. 


¿Escuchamos lo que otros nos dicen, aunque a veces nos duela o nos creemos autosuficientes?

¿Somos sinceros con los otros y les decimos aquello que creemos que les puede ayudar aunque en el momento no lo vean o preferimos callarnos?


TODO ESTO DIOS, LO PONEMOS EN TUS MANOS