Cada 9 de mayo, celebramos el DÍA DE EUROPA. En esta fecha el ministro de Exteriores francés, Robert Schuman, cinco años después de la II Guerra Mundial, propuso una nueva forma de cooperación política y económica en Europa, que haría inconcebible la guerra entre naciones europeas. La propuesta de Schuman se considera el comienzo de lo que hoy es la Unión Europea. 

La Unión Europea cuenta con muchas instituciones (Parlamento Europeo, Tribunal de Justicia, Defensor del Pueblo, Banco Central, Comité de Protección de Datos, etc. ) que velan para que se defiendan los derechos humanos en las Naciones asociadas, se proteja el medio ambiente del territorio, se apoye solidariamente a los países con problemas, y se garanticen la libre circulación de ciudadanos, capitales y productos.

Estos son los principios y valores comunes que subyacen a la vida en la UE: libertad, democracia, igualdad y Estado de Derecho, y fomento de la paz, la unidad, la cooperación y la estabilidad. 

Estos valores son también apoyados por la espiritualidad cristiana e ignaciana. Por eso, muchos cristianos honrados y con voluntad de trabajar por el bien común se han comprometido en el mundo de la política, ya que desde instituciones como estas (y otras) se puede hacer mucho bien a todos los ciudadanos.

Hoy hacemos una acción de gracias y una petición especial en torno al tema.

DIOS, TE DAMOS GRACIAS POR TODAS LAS PERSONAS QUE PARTICIPAN EN LA POLÍTICA CON VERDADERO INTERÉS POR FAVORECER A TODOS LOS CIUDADANOS; A MENUDO ESTOS HOMBRES Y MUJERES NO SALEN EN LAS NOTICIAS, SINO QUE DESARROLLAN UN TRABAJO ESFORZADO Y DISCRETO. HA HABIDO MUCHOS ASÍ A LO LARGO DE LA HISTORIA, Y HOY QUEREMOS RECORDARLOS.

TE PEDIMOS PARA QUE LOS ILUMINES CADA DÍA; PARA QUE NO SE DEJEN DESLUMBRAR POR LA FAMA, LA RIQUEZA O EL PODER, Y PERMANEZCAN FIELES A SU VOCACIÓN ORIGINAL DE SERVICIO AL PUEBLO.

TODO ESTO, DIOS, LO PONEMOS EN TUS MANOS