Miércoles de ceniza
Con el símbolo de la ceniza se nos da la oportunidad de cambiar. De cambiar nuestro corazón para dejar que Dios se acerque a nuestra realidad.
La cuaresma nos ofrece una oportunidad de cambiar el corazón, pero no se trata de hacer una lista interminable de propósitos, de ayunos o de penitencias que al final no vamos a cumplir. La cuaresma trata de cambiar nuestros corazones y no de rasgar nuestras vestiduras.
Y es que a veces nos es mucho más fácil hacer un rato de ayuno que dedicar tiempo a una persona que lo está pasando mal. Nos implica mucho menos dar una limosna que dejar de estar tiempo en internet, con el móvil o viendo series... para ayudar a los demás o simplemente para dedicar nuestro tiempo a un buen rato de oración.
Por eso, en este miércoles de ceniza, te ofrecemos que dediques un rato a la oración. Que sea un rato de silencio en el que puedas pensar y reflexionar sobre qué parte de tu corazón se han endurecido. En qué has pactado con la mediocridad. O en qué te has vuelto escéptico a la Buena Noticia de Jesús. Desde ahí entabla una conversación con Dios y preséntaselo. Esa es tu pobreza y tu debilidad. Lo que te va a recordar también la ceniza que te impondrán en el día de hoy. Desde ahí tendrás tiempo y podrás pensar sobre cuál es la limosna, la oración y el ayuno que te ayudarán a ti y a los que están a tu alrededor en esta cuaresma.
¡Te esperamos a las 11h en la iglesia!