Fotos: un universo

Hacer fotos es algo que se ha vuelto muy normal en nuestro día a día. Conseguimos fragmentar la realidad en un instante, tomar solo una parte de ella, la que nos interesa o llama la atención y guardarla. «Creamos» un mundo a partir del que existe.

Podemos contar una historia, mentir, expresar sentimientos innombrables, conseguimos estar en muchos sitios a la vez.

Vemos muchas veces la realidad a partir de un objetivo. Paramos el tiempo, el espacio y lo guardamos en nuestro teléfono y en ordenador. Tenemos infinidad de archivos que son instantes muertos, objetos y personas congelados en un presente inmóvil.

Hacer fotos es crear mundos; es revelar muchas veces la realidad que no vemos, multiplicarla y difundirla. Nos permite que en un segundo seamos capaces de tocar la belleza suprema o el dolor más hiriente.

Es parar la realidad, enfocar con el corazón, y ver cómo Dios está actuando en todas partes. La fotografía al alcance de todos es un arte. A Dios nadie lo ha visto, pero nuestras fotos pueden ser efecto de su acción.

¿Cómo es tu foto de Dios?

Nubar Hamparzoumian, sj

PastoralSJ


¡todo esto dios, lo ponemos en tus manos!