Se trata de un proyecto, altamente gamificado, que toma el nombre de un exoplaneta descubierto a mediados de noviembre de 2017. El atractivo y la curiosidad por la hipótesis de vida extraterrestre en este planeta, surgidas por la suposición de que las extrañas emisiones de radio extraterrestre detectadas en julio de 2017 provinieran de allí, creó un magnetismo perfecto para generar la narrativa de nuestro proyecto.
La narrativa del proyecto gamificado, cuenta la creación en 2098 de un negocio turbio de una farmacéutica, sobre medicamento contra el cáncer que, accidentalmente, generó mutaciones en los humanos y un impulso de comer carne humana. Esto mutantes, intentaron destruir la especie humana y usarla como simple ganado.
Por este motivo, un grupo de científicos emigraría a Ross 128 b, para generar, fuera de la amenaza mutante, un antídoto que volviera a los mutantes a seres humanos.
Los humanos crearon comandos especiales (alumnos) para ir a Ross 128 b en busca de ese antídoto y traerlo de vuelta a la Tierra. Pero no es tarea fácil, para ello, deberán ir superando una serie de misiones, enfrentarse a diversos monstruos extraterrestres, descodificar mensajes secretos enviados por los científicos... hasta localizar a los científicos y obtener el ansiado antídoto para obtener la victoria final.
Todo esto, se ha integrado en una estructura de videojuego. Hemos adaptado y usado de una forma diferente la plataforma de gamificación ClassCraft. En definitiva, los comandos deben superar un total de 9 de niveles o “pantallas”. Para ello, como es usual en los videojuegos, necesitarán superar la misión y eliminar a un monstruo de cada nivel, sin caer en batalla.