Su nombre
La incógnita sobre su nombre
Todas las personas que conocen nuestro instituto saben de él, pero no de su distinguido nombre.
Esta es una incógnita que a mucha gente le gustaría que le fuera desvelada, por esta misma razón en unas breves líneas vamos a narrarles la impresionante historia de este hombre: Ángel Sanz Briz.
Ángel Sanz Briz
D. Ángel Sanz Briz nació en Zaragoza, el 28 de septiembre de 1910, estudió en Escolapios, después Derecho en Madrid y en 1933, a los 23 años, ingresó en la carrera diplomática que culminó en 1980 cuando murió en Roma, el 11 de junio, permaneciendo en su puesto al servicio de su país hasta el último momento.
Era uno de los embajadores más veterano, respetado y con más prestigio dentro de su profesión, a juzgar por los puestos que le fueron encomendados a lo largo de sus más de cuarenta años de carrera diplomática por Europa, Asia, África y América del Norte, Centro y Sur.
Como carrera diplomática, la relación de puestos desempeñados es lo suficientemente expresiva como para no hacer más comentarios. a buen entendedor, con media palabra basta; dicen. Si no fuera así, basta enumerar las condecoraciones recibidas de los países en los que ejerció algún cargo diplomático:
- Gran cruz de la Orden del quetzal (Guatemala).
- Gran cruz de la Orden de Orange-Nassau (Holanda).
- Gran cruz del reino de Bélgica.
- Gran cruz de la Orden de San Gregorio Magno (Santa Sede).
- Gran cruz de la Orden Pro Mérito Melitensi (Malta).
- Comendador de la Corona de Italia (Italia).
- Oficial de la Orden de la Legión de Honor (Francia).
- Gran Cruz de la Orden del Sol (Perú)
- Gran Cruz de la Orden del Mérito Civil (España).
- Comendador y caballero de la Orden de Isabel La Católica (España).
- Gran Cruz de Carlos III (España).
- Medalla de la Orden del Mérito (Hungría) (a título póstumo).
Ángel arriesgó su vida armado de mucho valor para salvar a los judíos. Por sus méritos profesionales y su calidad humana le fueron concedidos los títulos de Hijo Predilecto de Zaragoza (1977), de Justo de la Humanidad concedido por el estado de Israel (1991) y el premio de El Justicia de Aragón a los Derechos Humanos (1994).
Fue el primer diplomático español que apareció en un sello de Correos.
Sus colaboradores más cercanos, la Sra. Tourné y su hijo Gastón, Zoltán Farkas, Giorgio Perlasca y el enigmático Javier Barrueta, continuaron su labor hasta la entrada de los rusos en la ciudad, el 15 de enero de 1945.
¿Cuantas vidas salvaron? Los cálculos más ajustados hablan de entre 5.000 y 6.000 personas. Pero el señor Sanz Briz raramente hablaba del tema. Se limitaba a explicar que cumplía con su obligación como funcionario del Estado Español y como persona.
Treinta partes de franqueza,
Veinte de interés
Y cincuenta de nobleza.
Eso es un aragonés.
Jota popular