A Debate

¿Se deberían prohibir todos los espectáculos y actividades deportivas en los que se hace uso de animales? 

La cuestión sobre si se deberían prohibir todos los espectáculos y actividades deportivas en los que se haga uso de animales es una pregunta que no podemos dejar de lado. En prensa y en redes sociales no dejamos de encontrarnos con personas que dicen cambiar su dieta por respeto a otros seres que, como nosotros, dicen que tienen derechos. O personas que dejan de comprar cosméticos y productos que han sido probados en animales porque lo consideran una injusticia. Y sin embargo, la experimentación con animales con fines terapéuticos parece necesaria a los ojos de otras muchas personas. No es extraño encontrar, en el norte de España, a defensores del lobo que están enfrentados a sus vecinos ganaderos y que son partidarios de una caza que les permita defender a sus rebaños de cabras y ovejas. Por seguir citando cuestiones que tocan de cerca a este problema, podemos mencionar la de si la tradición de los toros es una tradición cultural que merece ser preservada; o la de si la hípica es un deporte que hace sufrir a los animales y que, por tanto, debería ser prohibida.

Legalmente podemos decir que se han reconocido a los animales como sujetos de derechos. El texto definitivo de la Declaración Universal de los Derechos del Animal, fue redactado en Londres, del 21 al 23 de septiembre de 1977. La declaración proclamada el 15 de octubre de 1978 por la Liga Internacional, las Ligas Nacionales y las personas físicas asociadas a ellas, fue aprobada por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) y, posteriormente, por la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Sin embargo, no parece que esta declaración esté siendo respetada en la práctica.