XIV Seminario Internacional Freiriano Zapatista
Lo real y lo virtual

Este texto y todo mi trabajo educativo
en la FFyL es un agradecimiento a las
comunidades zapatistas, con quienes
aprendí a entender mejor a Paulo Freire

La gente empezó a aplaudir. Yo pensé:
Hombre, ando mal este año, no he
hablado todavía y ya
me están aplaudiendo”.

– SubMarcos

En el momento de pensar cómo acabar con la guerra contra las mujeres y los hombres de maíz, el Viejo Antonio decía al SubMarcos, hoy SubGaleano: “los arroyos… cuando bajan… ya no tienen regreso…más que bajo tierra”. Caminando en la montaña murió el Viejo Antonio, pero no dejó de enseñar al Sub la historia de la cultura de resistencia de los pueblos originarios. Igualmente siguió caminando hasta morir Paulo Freire. Tres años antes de su muerte, con sus enseñanzas nos seguía iluminando, sin dejar de aprender. En 1994 dijo que la opresión era peor que en 1970, cuando escribió Pedagogía del oprimido y por eso ese libro tenía más vigencia en 1994. ¿Y en la actualidad?

El final nos llegará a todas y todos los que seguimos colocando piedritas en los arroyos de la lucha, sin importar nuestras geografías y espacios, posibilidades y capacidades, contradicciones y resiliencias. ¿Cómo y contra qué y quiénes construir un espacio emancipador en el salón de clases? ¿A favor de quién y de quiénes podemos utilizarlo? Son preguntas que nos acercan a la epistemología freiriana.

En las comunidades zapatistas los procesos educativos están enraizados en la madre tierra. Su caminar a lo largo de los siglos las ha llevado a resistir y morir luchando contra el opresor, que se ha apoderado de gran parte de sus tierras y sus cuerpos. Esas comunidades han sido sometidas, asesinadas o despojadas de sus tierras. A lo largo de los siglos se fue fortaleciendo su resistencia, pero llegó el momento de decir ¡YA BASTA! y formar un ejército, el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN). Los arroyos bajan y ya no tendrían regreso más que bajo tierra. El 1° de enero de 1994 salieron dispuestos a morir para vivir.

En ese contexto, era el momento de agrietar los muros del salón de clases. Fueron largos años de trabajo en el COLEGIO DE PEDAGOGÍA, FFYL-UNAM para ir construyendo una propuesta pedagógica y metodológica. Habíamos unido el pensamiento de Freire y con el zapatismo. Cuando el EZLN bajó de las montañas, yo estaba leyendo la Pedagogía de la esperanza y comprendí que era el momento de salir de la esperanza como simple espera. Así entraron al aula tres de los primeros personajes creados por el Sub: el Viejo Antonio, don Durito y Sombra, el guerrero.

A lo largo de 44 años consolidé la propuesta pedagógica y metodológica. Nunca como modelo, sino como un camino epistemológico. Los referentes principales de la propuesta son los videos que han elaborado los estudiantes, no sin antes tener clara la PROBLEMÁTICA a estudiar. Para el cierre de los XIV SEMINARIOS INTERNACIONALES FREIRIANOS ZAPATISTAS la problemática que se aborda es el estudio de lo real y virtual en el aula, de las clases virtuales a las presenciales, después de dos años de estar sometidos a la enseñanza virtual. Y a partir de los videos nos acercamos a la teorización con tres ejes de referencia, que son la esencia de la propuesta pedagógica: PRAXIS FREIRIANA-PRAXIS ZAPATISTA-PSICOANÁLISIS POLÍTICO-PEDAGOGÍA ERÓTICA.

Sin embargo, la propuesta metodológica estaba “coja”. Habíamos logrado construir conceptos tales como cultura del silencio, lectura de la realidad, la sombra introyectada del opresor, relación entre autoridad y libertad, digna rabia, mandar obedeciendo, mujeres que luchan, pensamiento crítico transformador, filicidio, Eros y Tánatos. Pero estábamos atrapados entre los conceptos. Era necesario que las y los estudiantes hicieran suyos el proceso epistemológico y sus resultados.

¿Cómo hacerlo posible? Los Seminarios Internacionales fueron surgiendo en el lugar en donde el grupo de estudiantes emergía, cada una y uno, como sujetos autónomos, organizando, coordinando y participando en dichos Seminarios con carácter nacional e internacional.

En este compromiso, algunas y algunos estudiantes participaron en los encuentros propuestos por el zapatismo, en especial en la primera escuelita y en el de las mujeres que luchan. En ese camino de organización se consolidó el equipo LECTURA DE LA REALIDAD, conformado por alrededor de 11 estudiantes, además de Fernanda Navarro y yo. Los encuentros, enseñanzas, limitaciones y contradicciones finalmente, después de casi 10 años, llevaron a la extinción de ese equipo.

Siguió la guerra de desprecio, odio y opresión contra los pueblos originarios, seguían siendo vistos, más en este gobierno, como enemigos a destruir. ¿Para qué? Para apoderarse de sus tierras y algo así como lanzarlos a las calles como perros con rabia que deberían ser asesinados. El EZLN y las comunidades zapatistas estaban preparados para ello. El ¡YA BASTA! de la sociedad civil no ha llegado. Pero la lucha de resistencia y organización de los pueblos originarios continúa.

«Me enseñó el Viejo Antonio que uno es
tan grande como el enemigo que escoge
para luchar, y que uno es tan pequeño
como grande el miedo que tenga.

Elige un enemigo grande y eso te obligará
a crecer para poder enfrentarlo. Achica tu miedo,
porque si él se crece, tú te harás pequeño,
le dijo el Viejo Antonio al Sub una tarde de mayo y lluvia,
en esa hora en la que reina el tabaco y la palabra».

La semilla en defensa de la MADRE TIERRA ha seguido creciendo, si bien hoy gran parte de la sociedad esta anestesiada, perdiendo la capacidad de leer su realidad, desde abajo los pueblos originarios sí saben lo que la sociedad quiere ignorar. La guerra es contra ellas y ellos.

Así es y ha sido el proceso de los Seminarios Internacionales. Seguimos preguntándonos si ¿es posible la lucha social en el salón de clases? Hemos aprendido de las guerras de desprecio, pero hemos salido adelante. El verdadero enemigo está en otra parte. Es en el núcleo del capital trasnacional en donde se dicta el destino del mundo, que sigue siendo destruido por la economía del mercado, por las guerras constantes, por las invasiones y las apropiaciones de tierras, asesinando o desplazando a los habitantes locales. ¿A quiénes? A los pueblos originarios.

¿Qué quedará aun de esa propuesta pedagógica y metodológica, en favor y con los y las estudiantes? ¿Se tomará conciencia, nos concientizaremos permanentemente para ponernos al lado, en favor y con los pueblos oprimidos? ¿Hasta dónde al salir de la universidad existirá un espacio para ese tipo de propuesta?

Llegamos al final de los Seminarios Internacionales. ¿Qué pasará? nos preguntamos, obviamente no con los Seminarios, que tal vez no fueron más que un accidente o un encuentro de pensares y compartires que nos juntaron en el camino, sino con la guerra contra los pueblos originarios y en contra de la madre tierra.

“Rendirse

-Esa palabra no existe en lengua verdadera,

por eso los nuestros nunca se rinden y mejor

se mueren, porque nuestros muertos mandan

que las palabras que no andan no se vivan”.

-El Viejo Antonio

¿Seguiremos enseñando y aprendiendo a guardar silencio, a negar esta realidad?

Leí a Freire y comencé a tomar un cariño particular a mi profesión, luego años después entré a un aula donde un profesor nos contó que conoció Freire y que además trabajaba el Eros en el aula como una propuesta de vida, mencionó al EZLN movimiento que yo desconocía pero que se había gestado en las comunidades mayas, luego nos habló del psicoanálisis aplicado a los social de Fernando Martínez pero aunque la teoría fue clara, en el proceso de andar el aula la práctica tomó un matiz más vivencial, fue entonces cuando comprendí que había una Pedagogía que no sólo era teoría sino que era posible vivirse, pensarse desde la práctica, el aula y que podía tejer puentes con el cine, los conceptos, los periódicos, los sueños y utopías, los viajes y la literatura, la poesía y los compartires; pero sobre todo, era posible una Pedagogía de la participación estudiantil donde docente y estudiantes podían ser a la vez, no sólo se trataba del docente como otras propuestas educativas, sino de las y los estudiantes, del diálogo, de la interacción entre ambos, del aprendizaje y la enseñanza de ida y vuelta, de ser sujetos y sujetas en un proceso común, y entonces el proyecto «la lectura de la realidad en el aula» y la Pedagogía de Miguel Escobar, fueron para mí una revelación en la que profesor y estudiantes, podíamos conocer juntos. 

Así comencé mi historia con el proyecto al que de inmediato me uní, pues encontré un espacio para el pensamiento, la palabra y la práctica de la educación liberadora, junto con un profesor que confiaba profundamente en los estudiantes y que además nos invitaba a tomar el aula como nuestra y junto con el aula, otros espacios como los Seminarios Internacionales Freireanos, mismos que organizamos en colectivo, en los que yo participé desde 2007 al actual 2023 y que han sido un espacio de compartir aprendizajes, saberes, conocimientos, un espacio para la palabra, la música, el teatro de la imagen, la danza, un espacio para coincidir, de compañerismo, amistades y de crear y tejer lazos afectivos y complicidades. 

Un espacio de convivir con otros y otras estudiantes de distintas carreras como: políticas, sociología, Ingeniería, matemáticas, Filosofía, Economía, Historia, Teatro, Geografía, Derecho, Estudios Latinoamericanos, Arquitectura, Urbanismo, trabajo social, administración, química, letras, artes y Animación sociocultural, etc.

Estuvimos en Universidades como la UAM, la UACM, la Pedagógica Nacional, la Universidad de Morelia, la Universidad de Colima, la PUC SP en Brasil, la Universidad Metodista, la Universidad de Valencia, el Ies de Saint Jordi, la Universidad de París 8 y la Preparatoria 1, Anexa a la Normal; así como tener a estudiantes de Chiapas, Oaxaca, Morelia, Colima, Morelos, Aguas Calientes, Hidalgo, Puebla, pero también estudiantes de España, Chile, Alemania, Argentina, Brasil, Francia, con invitados internacionales como: Carles Monclús, Oscar Jara, Carlos Brandao, Eustaquio Romao, Danilo Di Manno de Almeida, Ana Albaradejo, José Beltrán, Cheron Moreti, Pep Aparicio, Diego Morollón, Nicolás Arata, Malena
Alfonso, etc. Y de México: Fernanda Navarro, Maricarmen Saldaña, Concepción Barrón, Gloria Muñoz, Alejandro Rojo, Fernando Mier y Terán, Claudia Pontón, Mario Quezada, Pilar Martínez, Marcela Gómez, Beatriz Cadena, entre otros y otras.

Y logramos un colectivo, ahora en la memoria histórica del proyecto, donde caminamos, escribimos, pensamos juntos, dialogamos y soñamos posibilidades a tiempos distintos entre Miguel Escobar, Fernanda Navarro, Andrea De Buen, Merary Vieyra, Milede, Olkan, Fidel Castro, Claudia Escobar, Noemí Mejía, Valeria Gil, Cora Jimenez, Luis Alberto Rosas, Felipe Cruz, Diego Morollón, Camila Saavedra, Dídac Albors, Nallely Morales, Dalia Huesca, Mariagna Jimenez y yo, Mayra Silva.

Hoy con la alegre rebeldía de haber tenido la valentía de participar ya 15 años, de distintas formas y de atreverme a ser sujeta en el aula y tomar como mío los espacios compartidos por Miguel Escobar, como estudiante, adjunta, parte del colectivo y el proyecto, haber hecho mis servicio social, tres tesis con el tema de Freire y el proyecto, y participar en los Seminarios Internacionales como ponente, organizadora y más; y de ser hoy también una profesora comprometida con la Pedagogía freireana, la pedagogía Escobariana y «de las lecturas de la realidad» la Pedagogía erótica, la Pedagogía nosótrica de las comunidades tojolabales; me despido de los Seminarios Internacionales, Freireanos, aunque en realidad sigan presentes de otras maneras, con la propuesta de seguir llevando a las aulas estás pedagogías, y con la propuesta fuera, de llevarlas al «Espacio Paulo Freire, México» que está naciendo como espacio itinerante y colectivo para seguir pensando juntos y juntas una educación con las y los de abajo. 

Querido Miguel, va un texto que espero sirva de motivación para mis colegas. Un abrazo con admiración y cariño, así como con deseos de que todo salga bien en los proyectos que vienen.

A ustedes, estudiantes, colegas, pedagogas y pedagogos. Desde otro territorio, no tan lejano, les hago llegar estas palabras que espero sean un empujoncito al alma que a veces se acuesta, hasta que llega alguien a empujarla, a cuestionarla, a recordarle que los relojes no paran, pero el tiempo regala instantes y de esos toca empaparnos.

Y hoy estamos aquí, bueno ustedes allá y yo acá o más bien yo allá y ustedes acá; con la palabra compartiendo, tomando espacios, poniendo el cuerpo y soñando juntas con otros mundos posibles.

Hoy hago un llamado a la memoria, a una pregunta que hace tiempo me hizo Miguel en una de mis primeras clases con él:

¿Cuál es el sentido de la vida?

Esa pregunta me acompaña siempre y he encontrado muchas respuestas. Algunas de las cuales se las agradezco al proyecto Lectura de la Realidad en el aula. Sin embargo, cada respuesta también viene acompañada de otras preguntas:  ¿Cómo luchar contra el autoritarismo y libertinaje en el aula?, ¿cómo transformamos nuestra práctica?, ¿cómo trascender el individualismo para construir en colectivo?, ¿a favor de que y en contra de qué mundo estamos? y espero que ustedes también estén llenas de preguntas.

Con las dinámicas y conceptos del proyecto, me fue quedando claro que la pedagogía es un camino lleno de preguntas, pero sobre todo lleno de sueños y utopías, en los que podamos imaginar sociedades más diversas, pacíficas, alegres, sin opresión, explotación, violencia; sin feminicidios, ecocidios, sin pobreza material ni espiritual.

Esos mundos posibles serán realidad cuando pongamos nuestra energía, conocimiento, cuerpo en ello.

Es por eso que los Seminarios Freirianos son tan importantes, pues son un medio y un fin en los cuales se escucha la voz de estudiantes, se construye con solidaridad, se ocupan espacios y se habla de lo importante, por ejemplo, del sentido de la vida.
Ojalá se nos haga fácil encontrarlo y sino, que en la búsqueda nos encontremos unas con otras hasta entender menos con la cabeza y más con el corazón, hasta resolver más con la palabra y nada con la violencia, hasta vivir más con la naturaleza y menos contra ella, hasta que todas las vidas importen y vivan con dignidad.

Hasta entonces, como dicen las zapatistas, cuando la dignidad se haga costumbre.

Envío a ustedes un saludo y  unas líneas a través de las que rememoro la experiencia de compartir con estudiantes del seminario que Miguel Escobar Guerrero ha desarrollado a lo largo de un largo trayecto y el que ha sido espacio para la construcción de la Metodología y Rescate de lo Cotidiano  y el rescate de lo cotidiano (MRCYT) a la que han abonado estudiantes como ustedes, quiénes desde su mirada crítica aportan de distintas maneras: a) como partícipes del dialogo y cuestionamiento a la propia MRCYT , b) como constructores de propuestas analíticas en las que se abordan problemáticas educativas y de carácter más amplio las que concretan en medios digitales y textos académicos y c) como integrantes de los seminarios internacionales – no sólo en lo presencial, sino desde la propia construcción de las propuestas articuladoras para los encuentros-posibles por la vinculación de Miguel con colegas de otras universidades españolas y francesas.

En cada Seminario Internacional Freiriano-Zapatista el colectivo se compromete con el estudio, con la reflexión, con el debate, con el cuestionamiento, con la esperanza y con la construcción de otro mundo a través de la lectura de la realidad con base en otras pedagogías. Los encuentros también hacen posibles lazos duraderos de amistad y trabajo.
Sin lugar a dudas la experiencia que vivirán como parte del XIV Seminario Internacional Freiriano-Zapatista en París, Francia y Valencia España será un parteaguas en su formación como pedagogos, las ciudades, las universidades, las aulas y sobre todo los diálogos   abonan a enriquecer de maneras muy distintas sus conocimientos/pensamientos/sentires y todo ello será parte de su ser pedagógico, se reconocerán en lo individual y en lo colectivo como quiénes construyen otras pedagogías.

Les comparto que mi experiencia de haber participado y acompañado procesos en algunos de los seminarios internacionales ha contribuido a mi ser docente, escuchar/dialogar sobre problemáticas que vivimos como universitarios en distintos contextos y en los que los estudiantes tienen la palabra es ya un logro de las otras pedagogías, así que auguro que el seminario los transformará para seguir en estos caminos en dónde la lectura de la realidad es el principio del trabajo pedagógico. 

Un saludo fraterno a ustedes y a los estudiantes de las Universidades con quiénes dialogarán.
Atentamente,

MARÍA DEL CARMEN SALDAÑA ROCHA 
PROFESORA DEL COLEGIO DE PEDAGOGÍA FFYL, UNAM