Tras varias propuestas de guion decidimos que MIA utilizase la magia del cine mudo para conmover a los espectadores a través de las imágenes y los dobles sentidos:
MIA, título con triple significado: nombre de mujer, pronombre posesivo y modificado por IA.
Pomo de la puerta girando entrando en la mente de MIA que ve la vida en blanco y negro. En contraposición el color para su verdugo.
Soga roja para el suicidio. Los suicidios por acoso y ciberbullying han aumentado un 40% desde el 2018 y son los causantes de más de 200.00 muertes de jóvenes al año.
El rojo en las manos, acto delictivo que cometen los adolescentes al compartir sin ningún pudor imágenes. El rojo en las manos también para hacernos ver que están manchadas de sangre.
MIA en la cárcel para denunciar la privación de libertad de la víctima.
Máscara roja de verdugo para expresar que tras ella los adolescentes se esconden en el anonimato para compartir, difundir imágenes ejecutando la pena de muerte de la víctima.
Cara a cara de los protagonistas frente a un tablero mostrando 2 puntos de vista muy diferentes. Esta parte del cortometraje es la que más duración tiene. Lo hemos hecho a conciencia para que el espectador se pare, piense y recapacite.
Ficha blanca sin letras, lanzamiento del tablero y el acosador quitándose la máscara ponen en en valor la importancia de recapacitar, empatizar y dar marcha atrás para corregir nuestras acciones.
Llamamiento a la acción: STOP y PÁRALO, ESTÁ EN TU MANO. Puños de ¡basta ya! y mordazas fuera, no nos vamos a callar.
Ventana a la esperanza con MIA sonriendo si entre todos paramos esto.