Durante la última década, en Jesuitak Durango hemos realizado una decidada apuesta y esfuerzo por virtualizar el centro, acorde a la realidad social, tecnológica y pedagógica que nos rodea.
Dicha labor se intensificó en el curso 2013-2014, cuando vimos la necesidad de dar una respuesta al alumnado proveniente del proyecto Eskola 2.0, con el propósito de seguir desarrollando las competencias apoyándonos en las herramientas TICs.
En el año 2008 comenzamos a darle vueltas a la idea de ir introduciendo las TICs en el aula ordinaria. Teníamos dos aulas de informática con 18 equipos en cada aula. Allí se desarrollaban las clases de informática, y en las horas sobrantes teníamos habilitado un sistema de reserva para el resto de asignaturas.
Este sistema al principio era válido, pero tenía un coste en desplazamiento, puesta a punto, puesto dichas aulas no estaban muy a mano.
Empezamos a ver posibles caminos y soluciones, y nos decantamos por un armario de 20 equipos de 14 pulgadas para la ESO en un principio, aunque a veces se utilizaba en Bachillerato. Gestionado por un sistema de reservas en el servidor.
Dicho proyecto fue implantado durante el curso 2008-09.
Como la mayoría de los centros de la comunidad del País Vasco, durante el curso académico 2009-10 nos vimos invadidos por los ordenadores de la Escuela 2.0. ¿Por qué esta sensación de invasión?
Teníamos un montón de ordenadores, uno por alumno, sin saber bien qué hacer con ellos, ni cómo trabajar.
En la medida de nuestras posibilidades y conocimientos, fuimos dando respuestas a las deficiencias que el proyecto en sí presentaba: habilitar instalaciones eléctricas, red wi-fi (carro móvil), formación al profesorado, servicio de mantenimiento etc…
La introducción de esta herramienta trajo como consecuencia un cambio en el modo de hacer de profesores y alumn@s. Algo para lo que no estábamos preparados, por falta de conocimientos, por inseguridad, resistencia al cambio de mucha parte del profesorado.
Todo este proyecto ha sido una palanca de cambio metodológico, muchas son las áreas y asignaturas que ha visto variada su forma de trabajar. Y posteriormente han tenido su extensión en cursos superiores.
La situación de crisis a la que no es ajena el mundo educativo, y sus consecuencias en forma de recortes, provocan que el proyecto de Eskola 2.0 quede en "stand by" en 2º ESO, en el Curso 2013- 2014. Durante el 2012-2013 nos iban llegando mensajes que sería el último año del proyecto.
Durante el año 2012-2013, vamos analizando la coyuntura. Desde el centro, vemos que el esfuerzo realizado por alumnado y profesorado y los beneficios de esta manera de trabajar. Aportaban valor añadido al proceso de enseñanza-aprendizaje, y comenzamos a explorar vías que pudieran darle una continuidad. (7)
No conocíamos ningún centro que de manera habitual trabajara con estas herramientas en 3º o 4º de la ESO. Existían experiencias, pero eran bastante puntuales, en algunas asignaturas, normalmente en el área tecnológica y/o artística etc… (8)
Si teníamos noticias, que la Universidad de Deusto, Campus de Donostia, llevaba realizando una experiencia durante varios años, que ellos valoraban como muy positiva, y aprovechando la cercanía fuimos a conocerla. Nos pareció que nos podía servir. (9)
1) Si en la Universidad utilizaban este dispositivo (año 2012-13), nos parecía adecuado el seguir por la misma línea.
2) El dispositivo no ofrecía dificultades específicas de utilización para profesorado y alumnado. El sistema operativo lo conocíamos y utilizábamos, las herramientas de creación de materiales (paquete OFFICCE) era utilizado por el 100% del profesorado y del alumnado..
Estas razones nos confirmaban que el proyecto podía ser asumible por el 100% del profesorado y del alumnado implicado. El dispositivo no suponía un obstáculo para poderlo utilizar.
Habilitamos una forma de adquisición de equipos para los alumnos de 3º ESO (curso 2013-14) que habían pasado por todo el proceso Eskola 2.0, y decidimos ampliarlo al alumndo de un curso superior, 4º ESO (que habían quedado fuera del proyecto Eskola 2.0).
Con el objeto de evitar una brecha digital entre alumnado con mayores posibilidades económicas (la mayoría del alumnado) y un grupo más pequeño con serias dificultades, a este último colectivo que se le aplica el fondo de solidaridad.
Se adquirieron equipos para todos los alumnos de 3º y 4º de la ESO, con un sistema de renting. Unos los pagarán en tres años y otros en 4 años. Los equipos son propiedad del centro (tema de licencias), y al finalizar el plazo, el alumnado podrá adquirirlo en propiedad por el simbólico precio de 1 euro. (11)