Entretenimiento y Cultura

Esperanto

Saluton al ĉiuj!

A lo largo de la historia de la humanidad, los humanos no hemos podido comunicarnos entre nosotros debido a que no todos hablamos el mismo idioma. Durante muchos años, pueblos diferentes se han mirado con recelo, debido a esta falta de comunicación. En la ciudad de Belostok (actual Bialystok, Polonia) en la Polonia Rusa, durante el siglo XIX, convivían varias culturas. Lituanos, alemanes, polacos, rusos y judios convivían sin comunicarse apenas los unos con los otros. La ciudad estaba plagada de desconfianzas y odio entre las cinco culturas. En este paisaje, nació Ludwik Lejzer Zamenhof en el año 1859, un polaco-judio descendiente de gente de letras. Desde pequeño, él fue consciente de la situación de su ciudad natal, y cuando alcanzó la adolescencia empezó a desarrollar un idioma neutro, de manera que nadie tuviera que aprender el idioma de ningún sitio y todos fueran iguales ante la lengua. Tomó inspiración de las lenguas que conocía: polaco, francés, ruso, yidis… El resultado final fue publicado en 1887, conocido como la Unua Libro (primer libro) y bajo el seudónimo de Doktoro Esperanto (doctor esperanzado), del cual el idioma cogería su nombre. 

El idioma fue creciendo, con gente poco a poco aprendiendo a hablarlo, entre ellos Juan Pablo II, Josip Broz Tito o Julio Verne. Todos los años, se lleva a cabo un Congreso Universal en una localización distinta del mundo. España recibió a los esperantistas en tres ocasiones (1909 en Barcelona, 1968 en Madrid y 1993 en Valencia). Fue en este primer congreso español donde Alfonso XIII le dió a Zamenhof la Orden de Isabel la Católica. Zamenhof fue nominado también al premio Nobel de la Paz en varias ocasiones, antes de morir en 1917 en Varsovia, ocupada por Alemania durante la Primera Guerra Mundial.


Yo aprendí el idioma durante el verano usando Duolingo. Debido a su simpleza y su facilidad de aprendizaje, ya puedo hablarlo más o menos bien. Animo a todo lector de este artículo a aprenderlo. Me ha ayudado muchísimo a la hora de entender la sintaxis castellana, puesto que usa conceptos que ya conocemos y los lleva a un punto que nos es más sencillo de entender. El idioma está compuesto por solo 16 normas, recogidas junto al diccionario en el Fundamento de Esperanto, que fue resultado del primer Congreso Universal en 1905. 


Otra parte importante del idioma es su comunidad. Compuesta por millones de personas alrededor del mundo, de diferentes orígenes, culturas y credos pero con una cosa en común; creemos en el idioma y que todos somos humanos e iguales. Existen organizaciones, como la TEJO (Tutmonda Esperantista Junulara Organizo/Organización Mundial Esperantista Juvenil), que organizan actividades y congresos independientes para jóvenes que quieran aprender el idioma; o servicios como el Postala Servo, un “AirBnb” para esperantistas cuyo único requerimiento para participar es saber esperanto.


Algunas frases básicas en esperanto:


Saluton! -> ¡Hola!

Kiel vi nomiĝas? -> ¿Cómo te llamas?

Mia nomo estas _. -> Mi nombre es _.

Mi loĝas en Hispanio. -> Vivo en España.

Ĝis la revido! -> ¡Hasta la próxima!

Mi parolas Esperanton. -> Hablo esperanto. 



Artículo escrito por Pablo Martín Fernández, alumno de 1ºA de Bachillerato.

El discurso del método de René Descartes

Antes de comenzar a hablar de este ensayo, tenemos que ponernos en situación de la vida de René Descartes, uno de los filósofos más importantes de nuestro mundo (además de matemático y físico), y uno que marcó aquel lejano siglo XVII. Con el Renacimiento, la filosofía aristotélica quedó negada, y se debía encontrar una filosofía para el hombre; esta ya no estaba basada en el simple deseo del saber humano, como sí lo estuvieron las anteriores, era un redescubrimiento: ahora el pasado le ordenaba al presente unas condiciones nuevas, quería una verdad certera.


René Descartes nació en 1596, estudió en el colegio La Flèche, el cual trataba en su plan estudiantil las Letras en general y más específicamente la Filosofía. Al terminar sus estudios dejó completamente las Letras y se dedicó a viajar durante 9 años por el mundo, con la idea de conocer distintas culturas y de recoger experiencias. En 1619 se puso al servicio del duque de Baviera, donde en su recluida condición pudo dedicarse a sus pensamientos para después de este periodo trasladarse a Holanda (en este tiempo se estaba produciendo la Guerra de los 30 años, en la cual fue partícipe).

Ya allí fue donde comenzó a desarrollar El método y posteriormente las Meditaciones metafísicas y tantos otros ensayos, o cómo el propio Descartes dio las letras x, y, z a las incógnitas y la a, b, c para las conocidas, o cómo él mismo también supuso un gran avance en la medicina de su época y que él mismo descubrió la segunda ley del movimiento.

  

EL MÉTODO DE RENÉ DESCARTES está compuesto por 4 preceptos que resumiré brevemente.


Al empezar a descartar Descartes todos sus pensamientos sin refutar, comenzó a darse cuenta de que queriendo él pensar que todo es falso, era necesario que el que lo pensaba fuera alguna cosa, lo que derivó al “Yo pienso, luego soy”, su primera certeza. 

Descartes razonó que había más perfección en el saber que en el dudar, y que los humanos dudaban por que eran imperfectos, pero que esa perfección solo podía venir de un ser más perfecto, el cual resolvió ser Dios. Ya que el objeto es mediato y el pensamiento inmediato, pero el pensamiento es necesariamente un objeto y así como no hay nada que legitime la existencia del objeto, pero existiendo el pensamiento, necesita la garantía de existir Dios. 

Las cosas que distingamos muy clara y distintamente han de ser verdaderas, como la tristeza, el amor, el calor y el frío. La razón nos dice que no todo lo que vemos e imaginamos sea verdadero, pero sí todas nuestras ideas y nociones tienen algo de verdadero, pues no fuera posible que Dios, que es todo perfecto y verdadero, las pusiera sin eso en nosotros. La razón es el medio, vemos el sol muy distante y empequeñecido pero sabemos que es una masa mayúscula e incandescente, no una bola radiante que ocupa un punto en el cielo y va rotando en torno a nuestro planeta o una bombilla de incandescencia programada; la razón nos ayuda a llegar a ello, y la razón es el don de Dios en  los humanos.

Así podemos decir que los animales no tienen razón, ya que aunque algunos, como los loros puedan articular palabras, no dan fe de lo que dicen, y así como ellos no nos ven como sus congéneres. Se les puede adiestrar y ellos pueden copiar movimientos, pero no saben lo que están haciendo, estos actúan conforme a sus órganos (que son harto parecidos a los humanos). Estos al haber sido creados por Dios y como el propio ser humano puede crear máquinas que calquen movimientos se entiende que sean las máquinas más finas y pulidas que existan y que se comporten de tan similar manera un ciervo de otro ciervo, pero un humano no se comporte así igual a otro humano en ningún caso, del mismo modo que los animales no se preguntan por la muerte ya que no están dotados del mismo tipo de alma que la humana (que es inmortal), como la que es animal (que da el movimiento como la humana pero es mortal).


René Descartes murió el 11 de febrero de 1650 en Estocolmo, estando al servicio de la reina Cristina de Suecia; se cree que murió de una neumonía, pero por las patologías presentadas, estas se relacionan más con un envenenamiento por arsénico (estas patologías fueron halladas en una carta del médico que atendió a Descartes en la corte de la reina).



Artículo escrito por Guillermo Iglesias Suárez, de 3ºC de ESO.


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