Cada 8 de marzo, el mundo se tiñe de color morado para apoyar el Día Internacional de la Mujer. En esta fecha, uno de los símbolos más extendidos es el lazo morado.
La vinculación del color morado se remonta al año 1908, cuando durante una manifestación del 8M, en la que se pusieron en huelga más de 40.000 costureras, se originó un incendio en la fábrica Cotton Textil Factory de Washington Square, en el que murieron 130 operarias al no poder huir de las instalaciones porque el dueño de la factoría las había dejado encerradas tras las protestas.
Se cuenta que el humo que salía de las instalaciones era de color morado porque esa era la tonalidad que poseían todas las telas que manipulaban las costureras fallecidas.
Además, las sufragistas inglesas también convirtieron al morado en un icono de la igualdad de derechos, portando bandas y flores de este tono en sus manifestaciones en favor del sufragio femenino, a comienzos del siglo XX.
Ellas lo utilizaron porque el morado era el pigmento utilizado por los soberanos y, para las sufragistas, simbolizaba la sangre real que recorría por las venas de cada luchadora por el derecho al voto.
En los años 60, las mujeres socialistas reivindicaban la igualdad de oportunidades y de derechos entre los dos géneros portando lazos violetas.
A partir de este momento, el color morado se asumió definitivamente como el de la lucha feminista. En esta línea hay quien defiende que el morado se escogió como el color del feminismo por ser el resultado de mezclar el azul -vinculado a la masculinidad- y el rosa -relacionado con lo femenino-.
Además de ser utilizado en el 8 de marzo, Día de la Mujer, el morado es el símbolo también del Día contra la Violencia de Género, que se celebra cada 25 de noviembre. En esta fecha, el lazo encarna el apoyo a las víctimas, a sus familias y representa ese "ni una menos" coreado en todas las manifestaciones.
Fuente: https://www.gndiario.com/8m-lazo-color-morado-dia-mujer