Relatos finalistas

Una pesadilla hecha realidad. (Ganadora-ESO2)

Lía, siempre deseó encontrar a su alma gemela. Un sueño, que creyó hacerse realidad al encontrar a la chica que buscaba, Isla. Era como había soñado, aunque a veces discutían porque ella no le contaba mucho sobre su vida personal o de antes de conocerse. Tampoco es que Lía le diera mucha importancia. Hasta que Isla empezó a hacer escapadas de madrugada, y desde entonces la notaba rara, cuando le preguntaba qué ocurría se molestaba, así que decidió una noche seguirla.

Y la vió, ahí estaba la chica que tanto amaba, al lado de tres cadáveres, supuso que eran sus padres y su hermana por las pocas fotos que Isla le había mostrado. Cada uno en un hueco del suelo. Estaba terminando de cavar otro agujero, del tamaño de Lía, y fue entonces cuando comprendió que no vivía un sueño, sino una pesadilla. Eso que cavaba, era su tumba.

Nayara Fernández Morais 2°A


Érase una vez un niño gnomo... (FINALISTA-ESO2)

Érase una vez un niño gnomo que vivía en la calle porque era pobre, aunque disfrutaba mucho su vida, no se alimentaba bien y pasaba frío.

Un día, los reyes estaban paseando y se lo encontraron, les dio mucha pena así que lo adoptaron. Cuando llegó al palacio se sorprendió mucho, viendo todos los lujos que tenía.

Los primeros días los pasó muy bien, hacía mucho tiempo que no comía un buen plato de comida, tenía muchos juguetes y le daban todo lo que quería, aunque no pedía mucho porque estaba acostumbrado a no tener nada.

Un mes después ya estaba cansado de vivir así, no era la vida de un niño gnomo normal, siempre tiene que vestirse elegante, viajar con sus padres por las reuniones, y se aburre porque no tiene hermanos. Empezó a echar de menos su otra vida.

Entonces comprendió que no vivía un sueño, sino una pesadilla.

Chiara Serbassi Galarza (2ºESO)

El niño perdido. (2ºFinalista-ESO2)


Érase una vez un niño llamado Claudio que vivía con su familia, su padre y su madre. Un día Claudio se despertó tarde para ir al instituto,era su primer día ya iba tarde. Después de 20 minutos llegó al instituto,Claudio entró corriendo, pero paró en seco, porque vio a lo lejos una sombra muy extraña, pero a Claudio le dio y siguió corriendo. Cuando Claudio estaba en matemáticas vio otra vez una sombra negra asomarse por la ventana, Claudio enfocó bien sus ojos y vio que era el director, entonces lo saludo y el director lo miró fijamente y también lo saludó. Pasaron meses y meses desde aquel día muy raro, pero un día de esos meses pasó algo muy raro, y desde ese día nada ha sido igual para Claudio. Ese día Claudio fue a la sala del director y vio que la puerta estaba cerrada, Claudo tocó y tocó "toc...toc...toc..." Claudio abrió la puerta y vió al director comiendo a niños, entonces comprendió que no vivía un sueño sino una pesadilla...


Mar Godoy Santana. (2ºB ESO)


La Casa De Ensueño


Una familia se fue a vivir a un barrio pijo, y a la casa más hermosa de allí, todo el mundo quería esa casa. Un día, mientras revisaban el correo, se encontraron una nota en la que decía: Bienvenidos, nuevos vecinos. Ya era hora de que alguien trajera sangre joven al barrio, ¿ya saben lo que se oculta tras las paredes? Tranquilos que ya lo descubrirán. Firmado El Vigilante.

La familia siguió recibiendo cartas de este estilo durante las seis semanas que estuvieron allí, y cada vez eran más oscuras. En la siguiente carta decía: ¿Cómo están vuestros hijos Vanessa y Carlos? Puedo oír a su mujer chillando sus nombres desde aquí. Yo los vigilo día y noche, como ha echo toda mi familia en las últimas décadas, conozco la casa entera y os puedo ver por sus bellos ventanales.

Entonces, comprendió qué no vivía un sueño, sino una pesadilla.

Gabriela Guerra Sánchez (2ºESO)

Juan era un niño...

Juan era un niño de 13 años al que le gustaba mucho el fútbol. Cuando estaba estaba en clase siempre se imaginaba que era un futbolista. No hacia tareas y no participaba en clase. Lo único que hacia era imaginarse cosas. Juan lamentablemente sacaba muy malas notas e iba a clases particulares. Como era de esperar tampoco hacia caso. Un día llegó el día de las notas. Juan sacó en todas las asignaturas un cero pero a él le seguía dando igual porque seguía dando igual porque seguía pensando que iba a ser futbolista. Cuando Juan se hizo mayor preguntó a todos los clubs de fútbol si le querían fichar, pero todos se fijaban en sus notas y decían que no. Entonces Juan comprendió que no vivía un sueño sino una pesadilla.

Daniel Björn Hinrichs Ahoba

Sueños y Pesadillas


Lucas se despertó aquel día aturullado ,no sabía qué hacer llevaba cuatro días comportándose de forma extraña.

No se acordaba de nada , solo recordaba a una mujer que venía por la noche a su cuarto y le decía unas palabras extrañas ´´Cumpulo say du Caramina´´

Al día siguiente siguió pensando qué podrían significar esas palabras .Cuando llegó a la biblioteca se dirigió a la sección de Brujería , buscó en todos los libros .

Cuatro horas después encontró el libro donde había un capítulo llamado Pesadillas. Tenía muchísimo , de todas las cosas de terror , pero creía que no tenía nada que ver con la brujería

.Pensaba que a lo mejor era un sueño y que solo era fruto de su imaginación.

Se fue tranquilo a casa , pero le volvió a pasar entonces comprendió que no vivía un sueño, sino una pesadilla.



Daniela Muñoz Padrón 2B


3ºESO

LA BELLEZA (Ganadora- ESO3)

Y así fue como sucedió, con ella frente al espejo, como Dios la trajo al mundo, y un par de documentos médicos en la mano que describía lo que sucedía. Y así fue como entendió que un físico no representa la estabilidad mental, porque puedes estar muy bien pero a la vez muy mal. Y así fue como por fin abrió los ojos y comprendió que no vivía en un sueño, sino una pesadilla, porque la belleza exterior puede ser muy hermosa pero también muy dolorosa.


Anabella Milliani.

Conociendo la realidad. (1ª FINALISTA-ESO3)

Llevaba varios años viviendo pero solo hace unos pocos comenzó a ver la realidad sobre existir en este planeta. Ver las noticias le frustraba pensando en cómo podían ciertas personas cometer esos actos, pero a la vez lo entendía, ya que también había sentido ira, rabia y miedo. Las acciones que nos pueden llevar a cometer sentimientos tan intensos es aterrador. Amaba y le fascinaba todo lo que veía y al mismo tiempo le irritaba y repugnaba. Tantos sentimientos mezclados. Despertar cada día solo para ver otra parte del mundo que no te alegraba precisamente. Pero había momentos felices ¿verdad? Se preguntaba por qué algunas personas idolatran el hecho de vivir cuando personalmente, no le hallaba el encanto. Entonces, comprendió que no vivía un sueño, sino una pesadilla.

Mélanys Alejandra Hernández Juliá 3°A

Inocencia. (2ª FINALISTA-ESO3)

Quedé en el parque con aquel extraño chico. Llevábamos dos semanas hablando y sentía una gran conexión con él. Yo vivía en otro pueblo así que acordamos vernos donde él residía. Estaba muy nerviosa pero tenía muchas ganas de conocerlo, ¿cómo combinaría la ropa?, ¿cómo sería su sonrisa?...

Llegó la hora y salí de mi casa a escondidas. Cogí la guagua y me senté en el último asiento del transporte. Rápidamente llegué al pueblo, me dirigí al parque donde nos habíamos citado, cuando mi móvil comenzó a sonar, "no podré estar ahí, pero podemos vernos", ese era el mensaje con una ubicación adjunta.

El lugar estaba muy desolado, un callejón, entré dispuesta a encontrarle. Lo último que escuché fue un golpe sordo antes de quedarme inconsciente. Había idealizado a ese chico y pensé que conocerle había sido un sueño, pero comprendí que no vivía un sueño, sino una pesadilla.

Ariadna Boada Santana.

Eros y Cosmos.

Eros y Cosmo eran dos buenos amigos que desde jóvenes deseaban mudarse y crear un reino en Marte. Durante toda su vida estuvieron planificando el viaje para salvar a la raza humana de la extinción por contaminación en La Tierra.

Cuando llegó el momento parecía perfecto. Ambos gobernaban en Marte y todos parecían felices. Era el sueño que tanto habían anhelado. Pero un día ocurrió una catástrofe.

Un incendio arrasó con el reino y sus habitantes y Eros no conocía la razón. Supuestamente, el reino estaba construido de forma que el fuego no podía entrar…A no ser que alguien hubiese causado el fuego.

Entonces, encontró a Cosmo, con una sonrisa en su cara.

  • Tú hiciste esto, ¡traidor! - Le gritó Eros.

  • Alguien tenía que terminar con esta especie.

Entonces, comprendió que no vivía un sueño, sino una pesadilla.

Teo Rivero Vega 3°B



Primer movimiento: el sueño.

Buscando su destino, él vivía en diferido, sin ser, ni oír, ni dar.
Bajo las piedras escondido, modificaba la realidad, huyendo de ella, vivía un sueño.
Él era consciente, pero no lo quería cambiar, ni dialogar.
De siempre andar desorientado, poco a poco, iba cayendo en picado.
Igual que un mal sueño.

Un día de la televisión, salieron bombas.
Fue cuando comprendió que, todo aquello, tan lejano a su realidad,
era tan solo un reflejo, que cada vez estaba, más y más cerca.

Él estaba en guerra contra su alrededor, no le hacía falta ningún motivo.
Y fue cuando esa realidad, se fue volando por el balcón,
a donde no tuviera enemigos.
Entonces comprendió que no vivía un sueño, sino una pesadilla.

Marta Ramos Ortega (3ºB)

El grito

Había una vez un hombre joven que acababa de independizarse. Siempre había sentido que le faltaba algo. Quizá estaba más cerca de encontrarlo de lo que pensaba. Un día encontró una vieja nota, que, al parecer, llevaba en su hogar mucho tiempo. La nota contenía unas coordenadas, que el hombre siguió. Estas le llevaron hasta una antigua casa. Inmediatamente se enamoró de ella. Su única aspiración era

conseguirla, y así fue.

Pero como se suele decir, no es oro todo lo que reluce. Al poco tiempo de la compra, el hombre cayó en la cuenta de que en su hogar habitaba alguien más. Una noche, escuchó un grito de socorro. Se dirigió a su origen. Ahí descubrió seis cadáveres y se dio cuenta de su inevitable destino. Entonces, comprendió que no vivía un sueño, sino una pesadilla, una pesadilla de la cual ya no podría escapar.

Rafael Estupiñán (3ºB)


La culpa

La mujer no pensaba que ella ni que el marido hubiese hecho tal cosa, y entonces desconcertada, caminaba y caminaba perdida y nerviosa intentando llegar hasta un lugar seguro. Justo cuando llegó a un pozo, vio que una sombra de extraño aspecto negro y otra extraña sombra blanca pero muy extrañas y las dos con algo en la mano se le acercaron, y le dijeron que sus crímenes no quedarían impunes, y que sus tormentos se habían manifestado, y entonces, comprendió que no vivía una sueño, sino una pesadilla y que toda la culpa era parte de ella, entonces las sombras desaparecieron y volvían un día tras otro.

Gabriel Hernández Ojeda (3ºC)


De regreso a casa

Un día como cualquier otro, me despedí de mis padres y me fui a pasear a mi perra.

–Hija, coge la chaqueta. ¡Hace bastante frío! -le dijo su madre.

No hice caso. Hacia tiempo que no me despejaba ni me sentía tan bien. El viento golpea mi cara, ya llega el invierno. Se me eriza la piel y quise haberle hecho caso a mi madre y haber cogido aquella chaqueta. Sigo corriendo hasta llegar de nuevo a casa, me paro en seco al ver la puerta abierta. Miro la escena que hay dentro y no lo puedo creer.

Ya no tengo hogar, ya no tengo a nadie. Ellos lo eran todo, ahora solo quedan lágrimas y recuerdos. Hubiera deseado no salir ese día, tal ves hubiera cambiado algo. Mi subconsciente ya no es el mismo sigue dándole vuelta hasta ese mismo día… Entonces, comprendió que no vivía un sueño, sino una pesadilla.

Beatriz Martín Fleitas 3ºB


4ºESO

El sueño. (GANADORAS-ESO4)


El pequeño Thomas vivía en su pequeña casa verde, con su fantástica familia.

El niño con ojos azules se levantó entusiasmado de su cama. Caminando hacia el comedor, vio a su hermana Lily en el baño con su esmalte de uñas carmesí.

Al llegar al comedor, su padre le saludó sin apartar la mirada del periódico. Su madre alegremente le dio sus tostadas.

A la tarde, Thomas disfrutaba con sus amigos.

Al volver, el padre le preguntó por qué había desaparecido.

-"Se lo conté a mamá" - contestó. Un silencio apareció en la sala, hasta que el padre dijo "¿Te lo pasaste bien?".

Cenaron, y Thomas fue directo a su habitación. Su madre entró y dijo "Dulces sueños, mi pequeño angelito".

Así, Thomas cayó en un profundo sueño.

Abrió los ojos y la cegadora luz de la mañana lo levantó. Los gritos de odio y el llanto desgarrador lo hizo entrar en la realidad.

Entonces, comprendió que no vivía un sueño, sino una pesadilla...

- Alexia Rodríguez Aceituno 4B

- Azul Irazu Mallo 4B