P. guarensis








Parque Natural de la Sierra y los Cañones de Guara

el refugio de

Petrocoptis guarensis

Alquezar, Sierra de Guara.

¿Dónde está Guara?

En el Prepirineo de Huesca, Aragón.

Alquezar es uno de lo pueblos más emblemáticos de la Sierra de Guara, donde su arquitectura se camufla con el propio color de los cañones.

Típico paisaje de los cañones de Guara con sus pulidos roquedos.

Y llegamos a sus cañones

El Parque Natural de la Sierra y los Cañones de Guara se fundó en 1990 y es uno de los parajes naturales más sorprendentes del entorno Pirenaico. Los cañones horadados en su roca caliza salpicada de conglomerados atraen recientemente a multitud de barranquistas y turistas, por su belleza, el color de sus aguas y el frescor que suponen en el cálido verano prepirenaico.

Río Vero en Lecina.

Estrechos cañones en Guara.

Pasarelas construidas para realizar rutas a pie por el cañón del Río Vero en Alquezar.

Pero estos lugares frescos y húmedos ya los había encontrado mucho antes nuestra protagonista: Petrocoptis guarensis.

Una especie que solo habita al abrigo de estos acantilados de Guara. Un tesoro digno de admirar que, parece, se ha beneficiado durante siglos sino milenios del frescor de sus aguas para resistir .

Petrocoptis guarensis en las paredes verticales del río Vero.

¿Y se puede vivir colgada de las rocas?

Pues parece que sí, y nos interesa averiguar cómo

Para intentar entenderlo mejor hemos realizado visitas a diferentes poblaciones, para estudiar sobre el terreno cómo crecen las plantas, recolectar semillas y tomar muestras para análisis genéticos.

Aunque lo primero es encontrar las plantas...

Cuevas y extraplomos son el paraíso de P. guarensis, a salvo del sol y escaladores.

En medio del matorral mediterráneo aparecen roquedos apropiados para P. guarensis.

Después hay que desplegar todo nuestro ingenio y destreza para observar, fotografiar sin dañar las poblaciones.

Victor Ezquerra se las ingenia para grabar de cerca las primeras flores del año.

Pocas plantas se dejan fotografiar.

Pablo Tejero Y José Vicente Ferrández trabajando en una densa población.

José Vicente tomando una foto.

Pablo Tejero disfruta de los enormes cojines.

No es frecuente encontrar poblaciones muy densas, aunque como vemos en las fotos, existen algunos casos. Observando las diferentes poblaciones nos llaman la atención ciertas cosas:

-Las plantas mantienen gran cantidad de hojas secas, que le dan un color pajizo a los cojines.

-Especialmente cuando es abundante, no solemos encontrar prácticamente plantas acompañantes, es una solitaria.

Los cojines mantienen muchas hojas secas de años anteriores.

Población densa en una comunidad casi monoespecífica.

Vamos a mirar de cerca

Nos vamos fijando en pequeños detalles que nos dan muchas pistas sobre las estrategias que siguen estas plantas para poder pervivir en estos ambientes tan complicados, casi sin agua, sin tierra, desafiando la gravedad y la erosión. Unas artistas.

Se aprecian dos filas de estambres, internos y externos, y las atrayentes lígulas coronales.

En el tubo de la corola, P. guarensis produce néctar que atrae a los polinizadores.

Los estambres se disponen facilitando el contacto con los abejorros atraídos a las flores.

En febrero se observa ya el comienzo de la floración, que se extenderá en primavera.

En estas dos fotos aportadas por Olatz Fernández observamos importantes diferencias en el crecimiento en dos años consecutivos. Aún es una incógnita esta variación y cómo consigue la planta los recursos para una producción tan prolífica.

Las flores maduran extendiéndose fuera del roquedo, siendo así muy visibles.

Misma planta que la anterior fotografiada un año después (ver marcas).

Tambie´n nos fascinan las semillas de Petrocoptis, que inlcuso persisten en las paredes pasado el invierno. Cuando estas se asientan en un lugar estable, repisa o rendija, suelen germinar con facilidad. Otra cosa es que consigan persistir.

Semilla de P. guarensis menor que la punta de un lápiz,. Investigamos la función de sus pelos.

Planta de segundo año con buen aspecto. Se perciben las hojas secas del primer año.

y la roca... ¿se come la roca?

Cuando la pared se resquebraja, deja al descubierto el entramado de raíces que tejen las Petrocoptis entre las fisuras y lajas, quizá ayudando incluso a su desprendimiento. Desde luego, hacen honor a la etimología de su nombre "rompe piedras".


Cuando los cojines se desprenden la inversión de recursos se concentra en los tallos.

Entre las lajas parecen desarrollarse las raicillas que nutren de minerales a la planta.

Es todavía un misterio entender el tejido de raíces que teje P. guarensis dentro de la roca. Sin duda ahí está la clave de su adaptación al medio y lo que la hace excepcional.

Y aunque no lo parezca, existen interacciones indirectas con otros animales, hormigas, arañas.... y hasta pájaros.

No es raro ver nidos de chochines camuflados en los cojines de Petrocoptis.

¿Quién entra primero? Las arañas son muy frecuentes en los cojines de Petrocoptis; más adelante las semillas pueden quedar atrapadas en sus redes, evitando su caída al suelo.

Esto es lo que pasa en las paredes de Guara, esperemos que lo hayáis disfrutado.

Con el apoyo de:

PRIOCONEX cuenta con el apoyo de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.