Caspian había experimentado muchas cosas aterradoras durante su vida, la constante amenaza que su tío representaba para su vida, perder a su madre y a su padre a una edad extremadamente joven, el nacimiento de su primo y luego su casi desaparición a manos del general Glozelle de su tío y luego forzado a un mundo que creía que había estado muerto durante los últimos mil años, lo que lo llevó a levantarse contra su tío y reclamar su primogenitura antes de reunir a la gente de Telmar con los narnianos, pero nada de eso lo había preparado para esto, el interminable esperando.

Durante todo el día que Edmund se había estado quejando de dolor en el abdomen, Caspian había llamado al médico de la corte que había llegado a la conclusión de que el rey Edmund había entrado en trabajo de parto y ni siquiera diez minutos después se rompió fuente de Edmund y lo llevaron de urgencia al teatro y al dormitorio improvisados. . Aunque el cuerpo de Edmund fue un milagro en sí mismo al poder concebir y llevar a su hijo durante estos últimos ocho meses, no había desarrollado una forma de dar a luz a su hijo. Entonces, a pesar de que podía llevar a su hijo una vez que rompía aguas, no había ningún lugar adonde ir. No había sido algo en lo que realmente hubieran pensado hasta después de haber regresado de derrotar a la niebla en Dark Island. Eustace y Lucy, de hecho, habían sido los que habían sacado el tema. Si bien habían explicado el regalo que Aslan le había otorgado a la pareja durante su viaje en el Viajero del Alba, ni una sola vez consideraron el proceso de parto real. Una vez más, la reina Lucía había acudido en su ayuda y había sugerido una cesárea, un método de parto utilizado en su propio mundo de Inglaterra para sacar al niño.

Con el apoyo de Eustace, Lucy y Edmund que sabían más sobre este procedimiento que nadie en Narnia ya que nunca se pensó que una mujer pudiera dar a luz de otra manera que empujándolo hacia afuera de su cuerpo, prepararon exitosamente un teatro adecuado para realizar el c —sección y dormitorios para permitir que el cuerpo de Edmund se recupere de un proceso tan traumático. Una vez que se preparó la habitación y el médico de la corte se entrenó en la teoría, no quedaba nada por hacer y luego esperar hasta que Edmund se pusiera de parto.

Cuando Edmund lo hizo, la espera comenzó debido a estúpidas reglas predeterminadas que no le permitían estar dentro de las cámaras mientras Edmund daba a luz, solo su hermana Lucy podía estar con su hermano ya que las estúpidas reglas decían que solo las mujeres y el médico de la corte podría estar presente para el nacimiento.

Caspian había estado atrapado aquí durante casi dos horas, sentado con Eustace que estaba tratando de asegurarle a su primo político que Edmund estaría completamente bien, que tenía a la Reina de Narnia allí con él y ambos sabían que Lucy no lo haría. No permita que nada le pase a su hermano y sobrina o sobrino. Eustace estaba bastante seguro de que Lucy había tomado su cordial curativo para curar las incisiones una vez que el bebé salió. En todo caso, la única razón por la que Caspian no había infringido las reglas y había irrumpido en el interior hace aproximadamente una hora para descubrir lo que estaba sucediendo era que confiaba en que Lucy cuidaría de Edmund, sabía que ella nunca dejaría que Edmund sucumbiera a la muerte mientras ella fuera con él.

Caspian se puso de pie de un salto cuando se abrió la puerta y salió el médico de la corte.

— Su Majestad, el nacimiento ha sido un éxito y usted tiene un bebé sano. — Dijo el médico. 

Caspian sintió que sus preocupaciones se desvanecían lentamente mientras agradecía al médico por todo su arduo trabajo y entraba en la habitación para encontrar a Edmund sentado en la cama con su bebé envuelto en una manta en los brazos de Ed. Fue un espectáculo bienvenido después de estas agotadoras horas de espera. Lucy se sentó a su lado, con los ojos fijos en su sobrino recién nacido.

— Hey. — Dijo Edmund, sonriendo a Caspian, quien se inclinó para presionar un beso en los labios de Edmund, luego en su frente antes de mirar a su pequeño. Su bebé tenía ojos marrones profundos y mejillas regordetas, Caspian podía ver a Edmund tan claramente en su hijo, su bebé tenía la misma forma facial, nariz y orejas de Edmund mientras que él había heredado su barbilla y labios de Caspian. Él era simplemente perfecto.

— ¿Has pensado en un nombre? — Preguntó Lucy.

Caspian y Edmund habían mantenido sus elecciones de nombres en lugar de silencio, negándose a decirle a Lucy o Eustace cada vez que preguntaban, aparentemente, querían que fuera una sorpresa para después del nacimiento. Edmund miró a Caspian, ambos decidiendo en silencio si querían decírselo a Lucy o mantenerlo en secreto por un tiempo más, no había duda de que una vez que la noticia del exitoso nacimiento de Edmund llegara a oídos del señor, querrían conocerlo. su nuevo heredero al trono.

— 𝓡𝓲𝓵𝓲𝓪𝓷 — Dijo Caspian.

— Es un nombre hermoso para un niño hermoso. — Dijo Lucy mirando al bebé Rilian una vez más antes de pararse. — Te dejaré en paz; Eustace y yo intentaremos mantener alejados a los señores por hoy. — 

— Gracias, Lucy. — Dijo Edmund arrastrándose en la cama para dejar que Caspian se subiera a su lado.

Lucy sonrió a la pareja antes de salir de la habitación, rodear con el brazo el de Eustace y llevarlo a la cámara del Consejo de los nobles, donde sabía que el consejo ya estaría en sesión.

— ¿Puedo abrazarlo? — Preguntó Caspian, y Edmund asintió antes de colocar gentilmente a su hijo en los brazos de su prometido. Era difícil creer que su pequeño tesoro finalmente estuviera aquí después de que Edmund hubiera pasado los últimos ocho meses cargándolo, Rilian era todo lo que Edmund siempre quiso en su hijo y mucho más. Rilian fue absolutamente perfecto.

— Es difícil creer que finalmente está aquí, pensar que hace todos esos meses cuando Aslan anunció que te había regalado la capacidad de quedar embarazado y luego tenerlo en nuestros brazos parece tan poco probable. Como si fuera un sueño del que tengo miedo de despertar. — Dijo Caspian, mirando a su hijo. No podía apartar los ojos de él. Era como si estuviera hipnotizado.

— Sé lo que quieres decir, aunque lo puedo decir con firmeza, ya que soy alguien a quien le acaban de abrir el estómago, esto definitivamente no es un sueño. — Dijo Edmund apoyando la cabeza en el hombro de Caspian, estaba cansado, estas dos últimas horas le habían quitado la energía. directamente de él.

— Duerme mi amor, yo velaré por ti y por Rilian. — Dijo Caspian cuando notó que Edmund luchaba por mantenerse despierto.

— Te amo Caspian... — Murmuró Edmund mientras cerraba los ojos, se abrazó a su prometido y lentamente se fue alejando del sueño.

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