CONSEJOS PARA UNA PRESENTACIÓN
En cuanto a la presentación informática:
Programa recomendado: Power Point. Tener siempre una copia en PDF por si hay algún error en el programa.
Primera diapositiva con el título (corto e informativo), autores, logo de la Universidad, asignatura, curso, etc.
Segunda diapositiva con un índice con los principales apartados de la presentación.
Estructurar bien los diferentes apartados de la presentación.
Las diapositivas tienen que ser un apoyo al discurso, no hay que leer las diapositivas.
Incluir poco texto en las diapositivas.
Frases cortas.
Las fotografías deben ayudar a entender el discurso.
Los gráficos y tablas deben ser explicados, señalando en la pantalla qué es cada parte, qué indican los colores, leyendas, etc.
Indicar la fuente bibliográfica para los datos que no son propios.
No cargar con mucha animación las presentaciones (puede retardar la presentación y confundir al público).
Tamaño de texto grande (nunca inferior a Arial 20-22) y color contrastado con el fondo de la diapositiva.
La presentación debe ser visible en toda la sala.
El número de diapositivas depende del tiempo de presentación (normalmente una diapositiva por minuto).
Evitar animaciones gratuitas y sobrecarga de imágenes y texto.
Una penúltima diapositiva con las conclusiones.
Diapositiva final con agradecimientos.
Pensar que la presentación es para un público que no conoce vuestro trabajo y por tanto no se debe dar por entendidas cosas que no se han explicado antes.
Numerar las diapositivas e indicar a qué apartado del índice pertenece cada una. De esta manera el público puede retomar la presentación si se ha perdido.
En cuanto a la expresión oral y corporal:
Ensayar antes el discurso controlando bien el tiempo.
Mirar al público.
Ajustarse al tiempo establecido.
Ajustar las partes. Evitar dedicar mucho tiempo a la introducción y poco a otras partes. No dedicar más del 15-20% a la introducción, 15-20% material y métodos, 5% conclusiones, y el resto a resultados y discusión.
Hablar despacio y claro.
Evitar un tono monótono en el discurso.
Hacer pausas cortas entre apartados distintos.
Señalar en la pantalla con el puntero, pero sin moverlo de forma nerviosa. Utilizarlo cuando realmente es necesario (explicar una figura, tabla o imagen).
Mover el cuerpo para enfatizar determinados aspectos (por ejemplo si una variable que se esta explicando sube se puede ir moviendo la mano hacia arriba).
Evitar manos en los bolsillos, rascarse, etc.